Por primera vez, la Corte Interamericana de Derechos Humanos trata, este miércoles 22 y jueves 23 de marzo, la problemática de una mujer a quien se le negó el aborto a pesar de que estaba en riesgo su vida, en el caso “Beatriz vs. El Salvador”.
El caso se relaciona con las alegadas violaciones a los derechos de Beatriz y su familia debido a la presunta prohibición absoluta de la interrupción voluntaria del embarazo en El Salvador.
Este acto impidió que tuviera la posibilidad de acceder a una interrupción legal, temprana y oportuna al tratarse de una situación de alegado riesgo a la vida, salud e integridad personal, indica el caso.
‘BEATRIZ VS. EL SALVADOR’
“Beatriz en la época de los hechos tenía 20 años y vivía en extrema pobreza en el cantón La Noria Tierra Blanca, municipio de Jiquilisco, El Salvador. Antes de su embarazo, en 2011, a la joven se le diagnosticó lupus eritematoso sistemático, nefropatía lúpica y artritis reumatoidea”, indica el expediente.
“Durante este primer embarazo, tuvo que ser hospitalizada en dos ocasiones debido a anemia y exacerbación de su cuadro lúpico. El 2 de marzo de 2012 inició trabajo de parto, que se complicó debido a una preeclampsia. Tuvo una cesárea y su hijo sobrevivió luego 38 días internado”, añade.
Debido a la enfermedad y complicaciones del embarazo, el 2 de mayo de 2012 un médico del Hospital Nacional de Maternidad le informó que no podría embarazarse nuevamente, y la citó para el 27 de mayo a efectos de realizar una esterilización quirúrgica. Beatriz decidió no asistir a dicha intervención, por temor a lo que pudiera pasar y que eventualmente podría pensar en tener hijos más adelante.
EL SALVADOR NEGÓ EL ABORTO A BEATRIZ PESE A QUE PODÍA MORIR
En febrero de 2013 se le diagnosticó un segundo embarazo de once semanas el cual se informó que era de alto riesgo. El 7 de marzo de 2013 le diagnosticaron que existía una malformación congénita del feto con anencefalia, condición incompatible con la vida extrauterina. Se le indicó que si el embarazo avanzaba existía la probabilidad de que ella muriera.
Ante la prohibición de aborto terapéutico en la legislación de El Salvador, la defensa legal de Beatriz presentó una demanda de amparo solicitando la interrupción del embarazo a efectos de salvar la vida de Beatriz. La Sala Constitucional admitió la demanda de amparo y dictó una medida cautelar.
Sin embargo, el 28 de mayo de 2013 declaró “no ha lugar” la demanda ya que consideró que no hubo una conducta omisiva por parte de las autoridades demandadas que hubiera producido un “grave peligro a los derechos a la vida y a la salud de Beatriz”.
TRAS LA MUERTE DE BEATRIZ, EL CASO LLEGÓ A LA CIDH
Según se informa, el 3 de junio Beatriz comenzó con trabajo de parto, por lo que debió ser sometida a una cesárea, y el feto anencefálico falleció cinco horas después. “Entre otras cosas, se aduce que en el presente caso confluyeron en forma interseccional múltiples factores de vulnerabilidad y riesgo de discriminación asociados a la condición de mujer joven y persona en situación de pobreza”, indicó el documento.
En enero de 2022 la Corte IDH comenzó a tratar el caso de Beatriz, quien falleció en 2017 en un accidente de tránsito, en contra de El Salvador, donde el aborto está prohibido bajo penas de cárcel de entre dos y ocho años. Habitualmente, los tribunales salvadoreños tipifican el aborto como homicidio agravado, elevando la condena a entre 30 y 50 años de prisión. N