Una niña de nueve años fue salvada de las fauces de un cocodrilo por su valiente hermano, quien luchó contra la bestia hasta que la soltó. Los hermanos, originarios de la región Kavango del Oeste, en Namibia, recogían agua del río Okavango en su aldea, Ntara, cuando el animal los atacó.
El reptil atrapó a Regimiya Haikera, de nueve años, en sus fauces y le mordió la parte interna del muslo y el lado izquierdo de las costillas, informó el sitio de noticias local New Era. Su hermano, Johannes Ndara, que tiene 19 años, entró en acción de inmediato.
“Mi hermana estaba detrás de mí cuando íbamos río abajo para llenar nuestras cubetas y la escuché gritar desde atrás. Cuando me di la vuelta, el cocodrilo la había atrapado. Entonces salté al agua y sujeté al cocodrilo por las mandíbulas y luché para liberarla”, dijo Ndara a New Era.
“Después de eso, me sentí impotente y simplemente la sostuve en mis brazos y lloramos a la orilla del río”, dijo. Haikera fue llevada al Centro de Salud de Bunya y luego trasladada de urgencia al Hospital Intermedio de Rundu. Según los informes, se encuentra en condición estable.
Los cocodrilos en Namibia son casi exclusivamente cocodrilos del Nilo, la especie más grande de África. Responsables de cientos de muertes de humanos cada año, los cocodrilos del Nilo pueden crecer poco más de cuatro metros de largo, y se ha encontrado que algunos especímenes atípicos miden más de seis metros. Tan solo en Namibia se estima que hay 11,000 cocodrilos.
Los ataques de cocodrilo son bastante comunes en las regiones pobladas por los reptiles. Algunas estimaciones dicen que las criaturas matan a alrededor de 1,000 personas cada año.
COCODRILO ASESINO
Solo en 2019, esta especie mató a al menos 48 personas en África, según CrocBITE, una base de datos global de ataques de estos animales. Se cree que más de la mitad de los ataques de cocodrilos del Nilo resultan fatales.
“La gente debe tener cuidado cuando está en la orilla del río y con el nivel del agua subiendo, pues la visibilidad se vuelve mala y así no se ven los cocodrilos. Y deben ir acompañados, eso fue lo que ayudó a la niña a la que atacó el cocodrilo, fue rescatada por su hermano mayor”, dijo a New Era Richard Aingura, director de la Dirección de Parques y Gestión de Vida Silvestre.
Aingura también dijo que enviaron a un miembro del personal a buscar al cocodrilo para poder capturarlo y alejarlo de las áreas habitadas por humanos. “También nos guiamos por las políticas, y por todos los medios tratamos de limitar cualquier peligro adicional que el animal salvaje pueda causar a los seres humanos.
“Una vez que el cocodrilo prueba la sangre humana y no hay fuentes de alimento, siempre es probable que vuelva a depredar humanos. Por eso siempre tratamos de moverlo o deshacernos de él para minimizar las posibilidades de que vuelva a atacar”, explicó el experto.
Otras formas de evitar verse involucrado en un ataque de cocodrilo incluyen nunca nadar o entrar en el agua en áreas donde se sabe que habitan estos animales, especialmente después del anochecer, y no preparar alimentos ni lavar platos a orillas del agua. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek).