La semana pasada, ante el temor de que los bombardeos y otras acciones militares provoquen un desastre en la central nuclear de Zaporiyia, la Unión Europea donó a Ucrania 5.5 millones de tabletas de yoduro de potasio.
En un comunicado de prensa emitido el martes 26 de agosto, la Comisión Europea dio a conocer dicha donación describiéndola como una “medida de seguridad preventiva para incrementar el nivel de protección” en las regiones aledañas a la instalación nuclear ocupada por las fuerzas rusas.
“Ninguna planta de energía nuclear debería ser utilizada como escenario de guerra”, acusó Janez Lenarcic, comisario europeo para Gestión de Crisis. “Es inaceptable que se pongan en peligro vidas civiles. Toda acción militar alrededor de la central nuclear de Zaporiyia debe cesar de inmediato… Las medidas de prevención salvan vidas, por lo que seguiremos atentos y responderemos sin vacilación”.
Si bien la central nuclear de Zaporiyia cayó en manos rusas durante los primeros días de la invasión, su operación ha seguido a cargo de personal ucraniano. En las últimas semanas, Rusia y Ucrania han intercambiado acusaciones de bombardeos en las proximidades de la instalación nuclear. Y el jueves 1 de septiembre, Energoatom —compañía responsable de las operaciones— informó a Reuters que los bombardeos rusos ocasionaron la desconexión de uno de los dos reactores de la central, si bien más tarde la misma empresa recurrió a la plataforma Telegram para informar que dicho reactor estaba nuevamente en línea.
PROTEGER A LOS CIVILES
El viernes 2 de septiembre, la cadena noticiosa CNBC confirmó que un equipo especial de la Agencia Internacional de Energía Atómica ya se encontraba en el sitio, y tenía la misión de “garantizar la seguridad nuclear” en Zaporiyia.
Por lo pronto, y de cara a la eventualidad de una lluvia radiactiva, las autoridades ucranianas están adoptando medidas para proteger a los civiles que viven en las áreas próximas a la central. Entre otras acciones, la distribución de pastillas de yoduro de potasio.
A decir de los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC), el yoduro de potasio (KI) es una forma no radiactiva de yodo que ayuda a evitar que la glándula tiroides absorba el yodo radiactivo que suele escapar al medioambiente durante un incidente de radiación, y que penetra en el cuerpo a través de la respiración o los alimentos.
Los CDC señalan que, cuando la tiroides absorbe elevados niveles de yodo radiactivo, esa captación incrementa el riesgo de que bebés, niños y adultos jóvenes desarrollen cáncer tiroideo “varios años después de la exposición inicial”.
A fin de que el yoduro de potasio ofrezca protección contra el yodo radiactivo, es necesario administrar la sustancia antes o inmediatamente después de la exposición.
“La administración de una cantidad adecuada de KI, en el momento adecuado, ayuda a impedir que la tiroides absorba yodo radiactivo”, explican los CDC.
CÓMO FUNCIONA EL YODURO DE POTASIO
“La razón es que la absorción tiroidea de KI no deja espacio para que la glándula absorba yodo radiactivo. Imagina que llenas un frasco con canicas azules. Si después añades canicas verdes, estas se desparramarán porque el frasco ya no tiene espacio para contenerlas”, añaden.
No obstante, la agencia de salud estadounidense previene que el yoduro de potasio puede tener efectos nocivos para la salud. Por esa razón, solo debe utilizarse bajo prescripción médica, por indicación de un funcionario de salud pública o a instancias de la autoridad para gestión de emergencias, ya que existen lineamientos en cuanto a las cantidades requeridas para proteger la salud en la eventualidad de un accidente nuclear.
Los CDC advierten que es posible que el yoduro de potasio no brinde protección total contra el yodo radiactivo. El KI es más eficaz si se toma poco antes o inmediatamente después de la contaminación interna con yodo radioactivo.
La eficacia del yoduro de potasio también depende de la cantidad de yodo radioactivo que entre en el cuerpo y qué tan rápido se absorba en el organismo.
La agencia de salud agrega que la administración de yoduro de potasio solo está indicada en individuos menores de 40 años, así como en mujeres gestantes o lactantes.
Por último, los CDC aclaran que la protección de KI se extiende únicamente a la tiroides. No protege otras partes del cuerpo y solo es útil contra el yodo radiactivo. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek).