Más de 2,300 millones de personas se enfrentan en situación de estrés hídrico en 2022 y cerca de 160 millones de niños están expuestos a sequías graves y prolongadas, indica un nuevo informe que se publica durante la decimoquinta sesión de la Conferencia de las Partes (COP15) de la Convención de las Naciones Unidas de Lucha contra la Desertificación (CNULD).
El estrés hídrico surge cuando la demanda de agua es más alta que la cantidad disponible durante un periodo determinado o cuando su uso se ve restringido por su baja calidad.
“Todos los hechos y las cifras de esta publicación apuntan en la misma dirección: una trayectoria ascendente en la duración de las sequías y la gravedad de sus impactos. Y que no sólo afectan a las sociedades sino también a los sistemas ecológicos de los que depende la supervivencia de toda la vida. Incluida la de nuestra propia especie”, afirmó el secretario ejecutivo de la Convención, Ibrahim Thiaw.
El informe recopila una serie de información y datos relacionados con la sequía. Y contribuye a orientar las negociaciones sobre una de las varias decisiones que tomarán los 196 Estados miembros de la Convención, que se publicarán el 20 de mayo al término de la COP15.
La información revela que el número y la duración de las sequías han aumentado un 29 por ciento desde el 2000.
IMPREVISTOS METEOROLÓGICOS, CLIMÁTICOS E HÍDRICOS
Los imprevistos meteorológicos, climáticos e hídricos acontecidos entre 1970 y 2019 han provocado el 50 por ciento de los desastres. Y el 45 por ciento de las muertes relacionadas con estas causas, sobre todo en los países en desarrollo
Las sequías representan el 15 por ciento de las catástrofes naturales, pero se cobraron un gran número de víctimas, aproximadamente 650.000 muertes entre 1970 y 2019.
Las sequías causaron pérdidas económicas mundiales de aproximadamente 124.000 millones de dólares ente 1998 y 2017.
Thiaw afirmó que la humanidad se encuentra en “una encrucijada” en cuanto a la gestión de las sequías e indicó que es necesario acelerar su reducción “urgentemente, utilizando todas las herramientas que podamos”.
700 MILLONES DE PERSONAS ESTARÁN EN RIESGO
De no actuar de inmediato, se estima que para 2023 unos 700 millones de personas estarán en riesgo de desplazamiento por causas relacionadas a las sequías.
Se prevé que para el año 2040 uno de cada cuatro niños vivirá en áreas con escasez extrema de agua.
Se cree que para el 2050 las sequías pueden afectar a más de las tres cuartas partes de la población mundial. Asimismo, entre 4800 y 5700 millones de personas vivirán en áreas con escasez de agua durante al menos un mes cada año, frente a los 3600 millones actuales. N