Estados Unidos ha registrado un repunte de los casos de coronavirus que ha llevado al país a registrar el cuarto día con mayor número de contagios desde que comenzó la pandemia y la jornada con más infectados de los últimos dos meses.
Según datos del Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), el país ha constatado en el último día 34,313 nuevos casos de COVID-19, una cifra solo superada por los datos recabados el 23 de abril (con 37,144 contagios), el 6 de abril (con 43,438) y el 3 de abril (con 34,864).
De esta forma, el organismo señaló en su página web que el total de contagios asciende así a 2,336,615, al tiempo que ha señalado que durante las últimas 24 horas han muerto 784 personas, lo que sitúa en 121,117 el balance de fallecidos desde el inicio de la pandemia.
Si bien se ha registrado un descenso de los casos en estados como Nueva York y Nueva Jersey, que supusieron los principales focos de infección a nivel nacional, el virus se encuentra ahora desplazándose por el sur y el oeste estadounidense. Esto ha llevado a los estados de Arizona, California, Misisipi, Nevada y Texas registrar cifras récord de contagio.
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Durante las últimas dos semanas, las hospitalizaciones a causa del coronavirus han aumentado notablemente en al menos catorce estados, entre ellos Texas, donde existe una grave preocupación a que el virus se esté acelerando, según informaciones de la cadena CBS.
A medida que aumenta la cifra de test de COVID-19, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha pedido a la población que permanezca en sus domicilios en todo momento. “Debido a la rapidez con la que se propaga actualmente el virus no hay motivo alguno por el momento por el que salir de casa”, ha expresado.
En las últimas dos semanas, Oklahomoa ha presenciado un aumento del 245 % de los casos y Florida un 168 %. Esto ha llevado al principal responsable científico en la lucha contra el coronavirus en Estados Unidos, Anthony Fauci, a aseverar ante el Congreso que las próximas dos semanas serán “críticas” para hacer frente al repunte de los casos en Florida, Texas y Arizona, entre otros estados.
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Así, ha pedido a la población no aglomerarse y utilizar la mascarilla siempre que puedan, si bien ha expresado que considera que una vacuna para la COVID-19 podría estar lista a finales de este año o principios de 2021. “Es una cuestión de cuándo y no de si sucede”, ha manifestado.