La tensión entre Estados Unidos y China sigue creciendo. Este miércoles, el presidente Donald Trump acusó que la “incompetencia” de Pekín fue lo que provocó una “matanza mundial”.
Trump se refirió en un tuit al informe de “un demente” en China en el que supuestamente se culpa a otros actores por el avance del virus y exigió que se le explique a este “tonto” que fue la “incompetencia de China y no otra cosa lo que provocó esta matanza mundial”.
Trump se refirió en un tuit al informe de “un demente” en China en el que supuestamente se culpa a otros actores por el avance del virus, y exigió que se le explique a este “tonto” que fue la “incompetencia de China y no otra cosa lo que provocó esta matanza mundial”.
Al inicio de la crisis Trump desestimó los riesgos y dijo en varias ocasiones que China estaba haciéndose cargo de la epidemia, pero a medida que el virus avanzaba cambió su discurso y comenzó a criticar a Pekín diariamente.
Apenas el lunes, Trump, acusó el lunes a la Organización Mundial de la Salud (OMS) de ser “una marioneta de China”, y confirmó que evalúa reducir o cancelar la contribución estadounidense a esta agencia de la ONU.
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“Son una marioneta de China, están centrados en China para decirlo mejor”, dijo en la Casa Blanca el mandatario, a lo que Pekín respondió que se trataba de una estrategia de “eludir sus obligaciones”.
Por su parte, el secretario de Estado, Mike Pompeo, abonó a la tensión este miérciles al felicitar a la presidenta de Taiwán, Tsai Ing-wen, que comenzó este miércoles su segundo mandato.
El ministerio de Defensa chino respondió en un comunicado diciendo que tal “gesto de Estados Unidos interfiere seriamente en los asuntos internos chinos y afecta la paz y la estabilidad”.
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Tsai, que pertenece a un partido independentista, fue reelegida en enero. En su discurso de investidura este miércoles dijo que China debe encontrar la manera de “coexistir” con un Taiwán democrático que no aceptará la dominación de las autoridades comunistas.
Un portavoz del gobierno chino aseguró, a modo de respuesta, que Pekín “jamás tolerará actividades separatistas” de Taiwán.
Pekín defiende la idea de “un país, dos sistemas” para Taiwán, al igual que hace con Hong Kong. Así, la isla conservaría sus libertades pero estaría bajo el control de Pekín. Tsai rechazó tajantemente este sistema durante su discurso del miércoles.
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Con información de AFP
