El mundo está lleno de sitios únicos e imponentes, desde cráteres hirvientes hasta cuevas llenas de gusanos luminiscentes. Mientras una pandemia mundial de desastres naturales y climas extremos como tsunamis, huracanes y tornados bombardea nuestra psique, podríamos caer en la tentación de no apreciar la naturaleza.
De hecho, disfrutar de las maravillas naturales nos da un respiro en este confinamiento por el COVID-19. Estos sitios son una excelente manera de comenzar a buscar esperanza en algunas de las más grandes creaciones de la Madre Naturaleza.
1. Géiser Fly
Condado de Washoe, Nevada
Este géiser, ubicado entre los pastizales del norte de Nevada, se creó por accidente cuando, según la historia, en 1964 una empresa de energía geotérmica perforó un pozo de prueba en el lugar donde ahora se encuentra el géiser. La combinación de depósitos de carbonato de calcio y agua hirviente produjo tres montículos de casi 2 metros de alto, teñidos en color rojo y verde brillante, y que arrojan agua caliente por los aires.
2. Cuevas de mármol
Aysén, Chile
Estas cuevas, a las que se puede acceder únicamente en bote, se encuentran en el corazón de la Patagonia y se formaron hace más de 6,000 años cuando las olas rompían continuamente contra las formaciones de roca sólida para crear estas únicas e intrincadas formaciones de mármol azul.
3. Lago Sørvágsvatn/Leitisvatn
Vágar, Islas Faroe
Este lago de agua dulce es famoso por que parece “flotar” por encima del océano. Aunque en realidad se encuentra a menos de 30 metros por encima del nivel del mar, desde varios ángulos parece que se encuentra a cientos de metros por encima del océano debido a su yuxtaposición con una espectacular cascada y el acantilado que lo flanquea.
4. Parque Nacional KrKa
Sibenik-Knin, Croacia
Este parque nacional del sur de Croacia es famoso por tener no una, sino siete hermosas cascadas de aguas color turquesa, entre ellas, la pintoresca cascada Skradinski buk. El agua cristalina de su cuenca suele estar llena de visitantes que acuden para darse un chapuzón.
5. Pamukkale
Denizli, Turquía
En Pamukkale (o “castillo de algodón” en turco), las cálidas aguas termales fluyen a través de los sorprendentes depósitos de piedra caliza que se han formado en los bordes de un valle. Y aunque la cascada natural ya hace que el viaje valga la pena, también se asienta en la antigua ciudad grecorromana de Hierápolis, que ha sido muy bien preservada para que los visitantes puedan explorarla.
6. Mar Muerto
Israel/Jordania
El Mar Muerto tiene la menor elevación de la Tierra, alrededor de 429 metros, y también es uno de los cuerpos de agua más salados, lo que genera una experiencia única: en lugar de nadar, los visitantes descubren que pueden flotar casi sin esfuerzo en estas aguas repletas de minerales.
7. Depresión de Danakil
Región de Afar, Etiopía
Uno de los lugares más calurosos del planeta, con temperaturas promedio de más de 34 °C y temperaturas récord de más de 50 °C, el calor de la actividad volcánica produce depósitos de color amarillo, verde y naranja. En el sitio abundan los manantiales sulfurosos, los volcanes, los géiseres, las lagunas ácidas, los salares y los lagos repletos de minerales.
8. Pozo de Darvaza
Darvaza, Turkmenistán
Se dice que este agujero ardiente en la tierra, conocido como “la puerta del infierno”, fue creado hace unas cuatro décadas después de que el suelo debajo de una plataforma de perforación soviética cedió y los gases tóxicos se encendieron para proteger la vida silvestre que lo rodeaba.
9. Los Pináculos
Cervantes, Australia
Levantándose desde el Parque Nacional de Nambung, en el oeste de Australia, estos miles de formaciones de piedra caliza parecen salidas directamente de una de las escenas en el desierto de Star Wars, y cada una de ellas es única: algunos visitantes incluso han dicho que varios de los pilares recuerdan a animales o personajes de caricaturas.
10. Cuevas de gusanos luminiscentes de Waitomo
Otorohanga, Nueva Zelanda
En el interior de este espectacular conjunto de cuevas, situadas en la Isla del Norte de Nueva Zelanda, se encuentra lo que parece una noche llena de estrellas, pero en realidad se trata de miles de gusanos luminosos. Un elemento clave para ver a estos gusanos creando su magia es el silencio total, debido a que no reaccionan bien al ruido.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek