Cielito Querido Café pasó de ser parte de una empresa con 80 años de historia a incorporarse a otra con más de un siglo.
Recientemente se dio a conocer que la cadena de cafeterías dejó de pertenecer a MOBILITY ADO, empresa que tras confirmarse la transacción destacó que se trata de tres empresas 100% mexicanas.
“Para todos nosotros en MOBILITY ADO, orgullosa empresa mexicana con 80 años de historia, nos llena de felicidad saber que un concepto tan mexicano, se va a una nueva casa que también es 100% mexicana, con más de 100 años de experiencia, y una de las empresas más fuertes de nuestro país”, manifestó la empresa en una carta de despedida para Cielito Querido Café.
La cadena está por cumplir 10 años en el mercado.
“Nos enorgullece saber que, lo que en un momento fue una idea para romper con los estereotipos de cafeterías que existían en nuestro país, se convirtió rápidamente en una marca y un concepto con el cual la sociedad mexicana se identificó inmediatamente. Su imagen, arquitectura, lenguaje y frescura, resaltando en todo momento la cultura y tradición mexicana, nos hizo sentir que cada Cielito Querido Café es como un pedacito de este increíble país. Y esto, complementado con el alto sentido humano del equipo que lo opera, unido a la gran calidad de sus productos y proveedores, 100% mexicanos, lograron la fórmula perfecta para posicionarnos en la preferencia de la sociedad mexicana, de manera muy rápida y exitosa”, señaló MOBILITY ADO.
En el texto de despedida de ADO a Cielito Querido Café queda de manifiesto lo difícil que fue para la empresa dar este paso, así como la seguridad de que este cambio será en beneficio de la cadena de cafeterías.
“Estamos seguros que viene un futuro lleno de crecimiento, consolidación y muchas cosas positivas, respaldadas de la calidad y profesionalismo que caracteriza a Grupo Herdez. No nos queda más que decir ¡GRACIAS! a la gente que hizo posible Cielito Querido Café, para nosotros ha sido todo un honor y orgullo esta aventura que comenzamos juntos” establece el comunicado.
