Un grupo de aficionadas al snorkel, sexagenarias y septuagenarias, que se hace llamar “Las abuelas fantásticas”, ha sido fundamental en el descubrimiento de una gran cantidad de serpientes marinas venenosas y documentar varias serpientes individuales en cámara.
El grupo ha pasado los últimos dos años involucrándose en un proyecto ciudadano científico que trabaja con los investigadores Claire Goiran, de la Universidad de Nueva Caledonia, y Rick Shine, de la Universidad Macquaire de Australia, para monitorear las poblaciones de serpientes marinas en la isla pacífica de Nueva Caledonia, un territorio francés exterior.
La especie de serpiente que ellas estudiaban era la Hydrophis major, un reptil marino que puede alcanzar longitudes de 1.5 metros (o más largas) y es venenosa para los humanos, dicen los investigadores. Se encuentra en el océano Índico, cerca de las costas de Nueva Guinea y Australia, así como en Nueva Caledonia, y es una de las serpientes marinas más comunes en el área.
En junio de 2017, las expertas en snorkel que conforman las Abuelas Fantásticas ofrecieron su ayuda a Goiran y Shine para recabar imágenes de las serpientes en sus hábitats en un popular destino turístico, la Baie des Citrons (o Bahía de Limones).
El fruto de su labor fue publicado en la revista Ecosphere esta semana.
Goiran y Shine dijeron que ahora saben que hay por lo menos 249 serpientes individuales en la bahía. Más de 140 de estas serpientes fueron identificadas por las Abuelas Fantásticas en un período de 25 meses.
En contraste, los investigadores solo habían registrado un promedio de 10 serpientes por año en los tres años anteriores. Eso es un aumento aproximado de 700 por ciento.
“Los resultados han sido extraordinarios”, dijo Goiran en una declaración. “Tan pronto como las abuelas se pusieron a trabajar, nos percatamos de que habíamos subestimado terriblemente la abundancia de serpientes marinas mayores en la bahía”.
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“He estudiado las serpientes marinas en la Baie des Citrons por 20 años, y pensé que las entendía muy bien; pero las Abuelas Fantásticas me han demostrado cuán equivocada estaba”, añadió ella.
Los resultados del proyecto no solo subrayan la cantidad sorprendentemente grande de serpientes que vive en la bahía, sino que revelan detalles de su comportamiento reproductivo: la Hydrophis major se aparea en invierno, está preñada durante el verano y alumbra en el otoño, dijeron los investigadores.
El hecho de que haya tantísimas serpientes en el área y no se haya registrado una mordida de esta especie subraya su “disposición benevolente”, comentó Shine.
“Ellas encontraron una gran cantidad de serpientes marinas letalmente tóxicas en una pequeña bahía que está ocupada todos los días por multitudes de lugareños y pasajeros de cruceros”, dijo Shine, “pero todavía no se han registrado mordidas de esta especie en Baie des Citrons, aseverando su disposición benevolente”.
“En resumen, la participación voluntaria de un grupo específico de miembros de la comunidad —mujeres mayores con el tiempo y la pericia para sondear un sitio local repetidamente y en detalle— está dando una ventana única a la ecología de una especie de grandes predadores marinos hasta ahora poco conocida”, expresaron los autores del estudio.
Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek