Hoy en día existen más de un millón de marcas de suplementos y su consumo cada vez es más frecuente. Debemos de saber que estos suplementos no están aprobados por la FDA (Food and Drug Administration) y muchos de ellos pueden prometer ciertos “beneficios” que no están comprobados ni estudiados. Por eso debemos tener mucho cuidado al consumir suplementos e investigarlos correctamente.
Asesorarte con un profesional de la salud puede ser lo mejor que puedes hacer para poder entender, según tu estilo de vida, qué te conviene ingerir.
Existen diferentes tipos de licuados proteicos:
Veganos. La proteína es extraída de semillas, soya, legumbres y granos.
Whey. La proteína es extraída de la leche.
Estos dos tipos son los más comunes y existen muchísimas variaciones de sabores, gramos de grasa, gramos de carbohidratos, endulzantes, orgánicos, etcétera.
Lee: Hombre muere intoxicado tras añadir una alta dosis de “suplemento dietético” a su licuado
Aspectos que debemos de cuidar al comprar cualquier proteína:
Azúcar. No debe de contener azúcar, ya que, si estás tomando el licuado con el propósito de cuidar tu imagen corporal, este azúcar podría perjudicar tus metas. Ponte atento con los diferentes nombres de azúcares (jarabes, lactosa, dextrosa, agave, cebada de malta, glucosa, etcétera).
Ingredientes en general. Procura que tu proteína sea lo más limpia posible, no más de diez ingredientes y que todos los que leas sepas qué son.
Carbohidratos. Cuida la cantidad de carbohidratos que contiene según tus metas. Estos carbohidratos son esenciales para el transporte de los aminoácidos que vas a tomar, pero que no contenga más de 10 gramos si estás buscando bajar de peso. Si deseas aumento de masa muscular puede excederse.
Colorantes artificiales. Estos son muy frecuentes en algunos suplementos de energía o los que ya vienen en líquido. Estos no harán directamente que subas de peso, pero sí afectarán tu organismo provocando inflamación y, por ende, muchas enfermedades como cáncer, problemas de tiroides o enfermedades autoinmunes a largo plazo.
No dejarse llevar por la portada. Muchos de estos suplementos contienen frases o imágenes atractivas para atraer al público, por eso debemos fijarnos cuidadosamente en la etiqueta nutrimental e ingredientes para poder elegir correctamente.
Elegir el tipo de proteína. Si eliges tomarla debes de elegir de dónde quieres que venga esa proteína, ya sea de la leche o de algún origen vegetal.
Te puede interesar: ¿Consumir licuados de proteína mejora el rendimiento y ayuda a bajar de peso?
Ahora bien… ¿es indispensable el licuado de proteína para ver resultados?
No. Los licuados de proteína pueden ser un arma de doble filo. Esto va a depender del estilo de vida de cada persona. Estos pueden ayudar mucho para personas que no tienen el tiempo de hacer una comida saludable y quieren una comida rápida y fácil para llevar a cualquier lado.
Pero hay personas que tienen el tiempo para poder comer en su casa comidas completas y saludables y no necesitan del licuado de proteína para poder ver estos cambios que están buscando.
En conclusión, entre más limpia sea tu alimentación es mucho mejor para el organismo. Comida real sin etiquetas es lo mejor que puedes hacer, y si tienes la oportunidad de hacerlo, no la desperdicies.
Por otro lado, los licuados de proteína pueden ser una buena herramienta para las personas que andan de prisa y fuera de casa para no caer en la comida chatarra. Son eficaces para los viajes, jornadas largas de trabajo o personas que no consumen suficiente proteína (pero eso debe de ser evaluado por un profesional de la salud).