Al oficiar la tradicional misa dominical en la Catedral de Puebla, el arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, hizo un llamado a los católicos a no enfocarse sólo en las fiestas que generan las posadas, sino a prepararse espiritualmente para la llegada de la Navidad con el nacimiento del Niño Dios.
Dijo que los feligreses todavía tienen ocho días para “abrir su corazón” y para convertirse en “amor vivo”. “Alégrense, gócense porque ya está cerca el señor”, exclamó ante decenas de poblanos reunidos en el recinto religioso.
Durante su homilía comentó que las personas deben de hacer penitencia, ayunar y purificarse. Además, deben de compartir el vestido y la comida y no difamar al prójimo.
Recordó que este domingo se concluyeron las fiestas guadalupanas y a partir de este lunes inicia el octavario antes de la Navidad, por lo que insistió en que todos los católicos se deben de preparar para la llegada del Niño Jesús.
Sánchez Espinosa, también pidió por los ancianos y enfermos y resaltó la participación de la comunidad católica de sordos de Puebla, quienes después de la ceremonia eucarística ofrecieron un concierto.