Oaxaca de Juárez, Oax.- La discriminación se convirtió en un delito en Oaxaca, luego que el Congreso del Estado aprobara reformas al Código Penal para establecer sanciones por hasta tres años de cárcel a quien incurra en este tipo de actos, y en caso de ser cometidos por algún servidor público, proceda también la inhabilitación.
La iniciativa, presentada por la diputada del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), María de Jesús Melgar, fue avalada por el pleno de la LXIII Legislatura, y contempla la adición del Capítulo IV, denominado “Discriminación”; el artículo 412 Bis al título 22 denominado “Delitos Contra el Derecho a una Vida Libre de Violencia”, del citado código.
La normatividad define que “comete el delito de discriminación quien por razones de origen o pertenencia étnica o nacional, raza, color de piel, lengua, género, sexo, preferencia sexual, edad, estado civil, origen nacional o social, condición social o económica, condición de salud, embarazo, opiniones políticas o de cualquier otra índole, atente contra la dignidad humana o anule o menoscabe los derechos y libertades de las personas”.
Y establece conductas tales como: quien provoque o incite al odio o a la violencia; niegue a una persona un servicio o una prestación a la que tenga derecho; veje o excluya a persona alguna o grupo de personas; niegue o restrinja derechos laborales, principalmente por razón de género o embarazo; o limite un servicio de salud, principalmente a la mujer en relación con el embarazo; o niegue o restrinja derechos educativos.
“Al responsable se le impondrá la sanción de uno a tres años de prisión o de ciento cincuenta a trescientos días de trabajo a favor de la comunidad y hasta 200 días multa”, establece el dictamen.
Al respecto, la diputada de Morena, considera que esto representa un gran avance en la defensa de los derechos humanos, puesto que aun cuando Oaxaca es una de las entidades con mayor diversidad étnica, la prevalencia de discriminación es muy alta.
“El delito no se perseguirá de oficio, se requiere que el o los afectados, presenten la denuncia ante las autoridades y es obligación del estado investigar”, indica en entrevista.
Afirma que el principal motivo por el cual se promovió esta ley, se debe a que mientras no exista una sanción, los actos de discriminación continúan repitiéndose, en agravio de grupos vulnerables como personas con VIH, indígenas, mujeres, discapacitados, entre otros.
*Discriminación
Las anécdotas de discriminación se replican en Oaxaca: hay quienes no pudieron ingresar a un restaurante por su color de piel o les solicitaron salir por considerar que su vestimenta no era la adecuada. Otros que no recibieron atención en una dependencia de gobierno porque usan huaraches y hablan una lengua originaria.
La discriminación, reconoce la diputada de Morena, María de Jesús Melgar, se padece en el estado con mayor diversidad étnica y cultural: el 65.7 por ciento de la población se considera indígena, de acuerdo a la “Ficha temática Pueblos indígenas” efectuada por el Consejo para Prevenir la Discriminación (Conapred).
Inclusive, recuerda la legisladora, en persona ha enfrentado la discriminación.
Mientras tanto, el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) registró que en 2015, la escolaridad promedio de las y los hablantes de una lengua indígena es de 5.7 años, lo que equivale a una educación primaria inconclusa. El nivel es mayor entre hombres (6.2) que entre mujeres (5.1). A nivel nacional, este indicador suma 9.1 años.
De acuerdo con la Encuesta Nacional sobre Discriminación en México (ENADIS) 2010, una de cada 10 personas en el país afirma que las personas indígenas son pobres porque no trabajan (Conapred 2011).