En las décadas de 1970 y 1980, su abuelo materno fue maestro de iconos de la música mexicana, personajes entre los que destacan José José, Emmanuel y Lupita D’Alessio. Su padre era cantante y desde muy joven le enseñó la música de grandes intérpretes, Tony Bennet, Frank Sinatra, Pedro Infante, Jorge Negrete, Javier Solís… Así, con ese amplio bagaje musical, Paco de María comenzó su carrera en la música, fusionando canciones mexicanas con el sonido estadounidense conocido como big band jazz.
A pesar de crecer en Estados Unidos, a los 17 años decidió trasladarse a la Ciudad de México para empezar su carrera musical. “Yo pienso y siento en español y siempre quise cantar en México”, cuenta en un acogedor café de la colonia Anzures, Otro Café. La decisión fue arriesgada, pues en México no existía ningún proyecto como ese. “Conocí al maestro Eduardo Magallanes, que fue mi primer productor. En 2006 hicimos el primer demo, se lo enseñamos a Juan Gabriel y le gustó, entonces nos regaló una canción, así grabamos el primer disco, que salió en 2008. Ese mismo año Juan Gabriel me invitó al Auditorio Nacional a cantar con él y desde ahí ha ido creciendo el proyecto”.
Paco de María cuenta que hacer big band jazz en México y en español no ha sido fácil, pero asegura que su meta en la música nunca ha sido hacerse famoso. “A mí hacer música me llena, me da plenitud, me hace sentir bien, y el éxito que ha ido llegando es el resultado de hacer las cosas con el corazón y con mucha dedicación. He estado en el Lunario, en el Plaza Condesa, en el Teatro de la Ciudad, y ahora llegar al Teatro Metropólitan es muy importante y muy gratificante para mí”.

—¿Cuándo fue la última vez que te saliste de tu zona de confort?
—Ayer. Hay cosas relacionadas con las redes sociales con las que no me siento cómodo: no me gusta hablarle a la cámara, no me gusta tomarme fotos. Ayer fue una de esas ocasiones donde uno de mis socios me dijo que tenía que estar en la cámara y lo hice. Casi todos los días tengo ese tipo de experiencias, pero he aprendido que son las cosas que me hacen crecer, entonces, si veo que son constructivas, las hago aunque me saquen de mi zona de confort.
—¿Quién fue la última persona que marcó tu vida?
—Muchas, he tenido la fortuna de tener familias adoptivas aquí en la Ciudad de México porque toda mi familia de sangre está en Estados Unidos. Ahorita vengo de casa de la persona que es como mi mamá aquí en México y ella ha marcado mi vida y me ha hecho crecer mucho.
—Si tuvieras que hacer una última colaboración ¿con quién la harías?
—Con Tony Bennet, ese es mi modelo a seguir número uno. Sería mi carrera perfecta, tiene 91 años y sigue renovándose, sigue cantando y siento que la música te mantiene con energía y juventud.
—¿Cuál fue el último álbum que escuchaste completo?
—Ya casi nadie escucha los álbumes completos. Escuché el soundtrack de la película de Ted, del osito. Canta Norah Jones que me gusta mucho y es puro big band.
De María estrenará álbum a mediados de abril y el 11 de mayo se presentará en el Teatro Metropólitan, donde festejará sus diez primeros años de carrera. En el concierto no solo estará su orquesta de big band, escucharemos también momentos muy mexicanos con un mariachi. “Es un concierto que estamos planeando con momentos muy especiales”, cuenta Paco, emocionado.