
En México y el mundo los viajeros están dejando claro que quieren algo más que un bonito selfie en un icono local.
En 2024 y 2025, el turismo de lujo dejó claro que ya no se trata solo de hoteles con sábanas de 800 hilos o suites con vista al mar. Los viajeros de alto nivel —ese segmento que invierte miles de dólares por viaje— están buscando algo más: experiencias que conecten con sus valores, que sean auténticas y que, además, tengan un impacto positivo.
Según datos de Global Growth Insights, el turismo experiencial y sostenible crecerá hasta superar los 31 mil millones de dólares en 2025, con una tasa anual del 8.4%. Y las cifras lo confirman:
La demanda de turismo wellness creció 61%.
La preferencia por espacios ecológicos subió 57%.
El 78% de los turistas de alto perfil está dispuesto a pagar más por vivencias exclusivas.
Esto abre la pregunta: ¿qué es exactamente lo que motiva este gasto extra?
Cultura, gastronomía local, bienestar, aventuras en lugares remotos y, sobre todo, personalización total. Nada de itinerarios genéricos: quieren viajes a su medida, inmersivos y sostenibles.
En nuestro país, el turismo de lujo se ha convertido en motor económico. Solo en 2024, el sector hotelero de alta gama creció 50% en inversiones, según CBRE, con proyectos exclusivos en Los Cabos, Riviera Maya y Punta Mita.
El mercado mexicano de hoteles de lujo alcanzó un valor de 1.9 mil millones de dólares en 2024 y podría llegar a 3.2 mil millones para 2033, de acuerdo con IMARC Group. Y no es todo: México generó cerca de 22.5 mil millones de dólares en ingresos por turismo de lujo en 2024, consolidándose como líder en América Latina.
La inteligencia artificial y las plataformas digitales no solo están mejorando la logística, también están redefiniendo lo que significa viajar con exclusividad.
El 56% de agencias de viaje en el mundo ya usa IA.
En México, la cifra es del 80%.
El 75% de los viajeros prefiere hoteles con innovaciones tecnológicas avanzadas (McKinsey).
Desde apps que sugieren experiencias personalizadas basadas en tus gustos, hasta habitaciones inteligentes y sistemas que optimizan el consumo energético, la tecnología está creando un turismo de lujo más personalizado, eficiente y sostenible.
Y los resultados se notan: en el primer trimestre de 2025, México recibió 11.86 millones de turistas internacionales, un 5.7% más que en 2024 (SECTUR).
Lo que viene: el futuro del turismo de lujo en México pasará por experiencias aún más hiperpersonalizadas, viajes con huella de carbono reducida, hospedajes que integren tecnología inmersiva y, sobre todo, una narrativa auténtica que conecte con el viajero a nivel emocional. N