Ámsterdam prohibirá todas las visitas guiadas a las zonas rojas de la ciudad a partir del 1 de abril, incluido De Wallen, la zona roja más grande de la ciudad. Quienes no cumplan podrían ser sujetos a una multa de hasta 8,100 dólares.
Las nuevas normas sobre los tours de zonas rojas buscan frenar la aglomeración en estas áreas, que es un “fastidio” para los residentes y los trabajadores sexuales, y para “crear más espacio en la calle” y “asegurar un ambiente laboral más confiable para los trabajadores sexuales”, anunció la municipalidad de Ámsterdam.
También se considera el prohibirles a los turistas los famosos cafés de cannabis de la ciudad. Las autoridades locales esperan que ambas medidas puedan ayudar a enfrentar el problema del “turismo excesivo” en la ciudad, la cual se dice que alberga alrededor de 17.4 millones de visitantes, según las cifras más recientes de la organización de turismo de la ciudad.
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Supuestamente, los funcionarios de la ciudad buscan construir una especie de “centro erótico” u “hotel de prostitución” independiente como un área designada para la prostitución, cines eróticos y otras instalaciones relacionadas para ayudar a aligerar los embotellamientos en las zonas rojas.
Este complejo de trabajo sexual tendría un “gran techo de vidrio para la luz del sol o ver las estrellas”, mientras que “todas las habitaciones se conectarían con una plaza que tenga iluminación apropiada, aunque sugerente”, según los funcionarios de la ciudad.
Todos los tours organizados a De Wallen fueron prohibidos el mes pasado, pero la ciudad introducirá una prohibición a los tours que visiten todos los escaparates de trabajo sexual a lo largo y ancho de la ciudad a partir del 1 de abril.
Los tours guiados que rompan las normas serán multados con alrededor de 205 dólares y el tour será disuelto de inmediato tras un período de gracia de seis semanas. Después de tres violaciones, se le retirará el permiso temporalmente al guía, mientras que el cuarto incumplimiento conllevará la prohibición permanente de operar. Las compañías de tours también enfrentarán una multa entre 2,700 y 8,100 dólares.
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“Es irrespetuoso tratar a los trabajadores sexuales como una atracción turística; por ende, se prohibirán los tours a De Wallen”, dijo en una declaración Victor Everhardt, subalcalde de Ámsterdam.
A los turistas individuales todavía se les permitirá deambular por las zonas rojas para visitar los escaparates de trabajo sexual por cuenta propia y se permiten los tours fuera de las zonas rojas. Pero todos los tours y sus participantes dentro de la zona Centrum en el centro de la ciudad plagado de turistas deberán cumplir con las nuevas normas más estrictas a partir del 1 de abril, según Everhardt.
El nuevo reglamento incluye un límite de 15 participantes por tour.
“Un grupo más pequeño reduce el área que un grupo usa en el lugar. Aumenta la claridad para los transeúntes y conductores, lo cual tendrá un efecto positivo en el flujo del tránsito. También aumenta la claridad para los miembros del grupo en sí, lo cual aumentará su consciencia del ambiente. Esto creará una situación [de tránsito] más segura”, dijo la municipalidad en una declaración que resumía las nuevas normas sobre los tours en zonas rojas.
Varias normas ya se aplicaban, como una prohibición a consumir drogas o alcohol durante cualquier tour, gritar o hacer ruidos fuertes, y quedarse parado en “lugares sensibles a la presión”, como las entradas de tiendas, pórticos de hogares y establecimientos de comida durante las horas de servicio.
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“A pesar de las medidas anteriores, los residentes, empresarios y trabajadores sexuales siguen experimentando el gran fastidio de los grupos guiados”, expresó la municipalidad.
La ciudad espera que las normas más recientes “mejoren la calidad de vida en el centro de la ciudad y reduzcan la inconveniencia para los residentes”, quienes han seguido “experimentando muchísimo fastidio por los grupos en el centro de Ámsterdam”, decía la declaración.
La popularidad perpetua de los cafés de cannabis de la ciudad (también conocidos como cafeterías), donde la venta de marihuana para consumo personal está permitida, también ha contribuido al turismo excesivo al paso de los años.
Un nuevo sondeo a cerca de 1,161 turistas entre 18 y 35 años, llevado a cabo por el gobierno de la ciudad, mostró que las cafeterías eran un gran motivador para estos turistas, ya que alrededor de dos terceras partes de ellos visitó la ciudad para consumir marihuana.
La investigación también mostró que alrededor de una tercera parte de los encuestados visitaría Ámsterdam con menos frecuencia si les prohibieran los cafés de cannabis, mientras que el 11 por ciento dijo que ya no la visitaría en absoluto.
Femke Halsema, alcaldesa de Ámsterdam, declaró que la ciudad usaría el sondeo como una base para investigar políticas que ayudarían a “reducir el poder de atracción del turismo de cannabis” en Ámsterdam.
Al momento, no hay planes definitivos para prohibirles a los turistas extranjeros el visitar los cafés de cannabis. “Va a tomar algo de tiempo adoptar las siguientes medidas, y no hay una verdadera mayoría clara [en el consejo de la ciudad] por las soluciones”, añadió Sebastiaan Meijer, un portavoz de la alcaldesa.
Newsweek ha contactado a la municipalidad de Ámsterdam, I Amsterdam (la organización turística de la ciudad), Holland.com (la oficina nacional de turismo de los Países Bajos) y PROUD (Unión Neerlandesa de Trabajadores Sexuales), para que comentasen sobre el nuevo reglamento.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek