Las muertes por enfermedades no transmisibles (ENT), como las cardiovasculares, el cáncer y la diabetes, aumentaron 43 por ciento en el continente americano desde el año 2000. En tanto, el suicidio fue la cuarta causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años, la cual se cobró 100,760 vidas, informó este miércoles la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
“Las ENT son la principal causa de muerte en la región, responsable del 65 por ciento de todos los fallecimientos y casi 40 por ciento de estas muertes ocurren antes de los 70 años. Si bien el envejecimiento y el crecimiento poblacional contribuyen a esta carga, el aumento se debe en gran parte a factores de riesgo modificables como el consumo de tabaco, la alimentación poco saludable, la inactividad física y el consumo nocivo de alcohol”, pormenorizó la OPS.
De acuerdo con el informe, las enfermedades cardiovasculares lideraron la tabla con 2.16 millones de decesos, seguidas por el cáncer (1.31 millones), la diabetes (más de 420,000) y las enfermedades respiratorias crónicas (más de 416,000 muertes).
“El aumento de muertes por ENT es una llamada de atención urgente. Demasiadas personas están muriendo de forma prematura por enfermedades que, en su mayoría, se pueden prevenir y tratar. Con detección temprana, diagnóstico oportuno, acceso a la atención y políticas sólidas, podemos salvar vidas”, afirmó el doctor Jarbas Barbosa, director de la OPS.
LAS ENFERMEDADES NO TRANSMISIBLES Y LOS DESAFÍOS AMBIENTALES
A tenor de la agencia de salud, los factores de riesgo también van en incremento. En 2022 la obesidad afectó al 33.8 por ciento de los adultos —una subida del 28 por ciento desde 2010—, mientras que cerca del 40 porciento no realizó suficiente actividad física.
De igual manera, la prevalencia de diabetes llegó al 13.1 por ciento y 43 millones de personas mayores de 30 años con esa enfermedad no tuvieron acceso a la atención que necesitaban. Además, la hipertensión afectó a más de un tercio de los adultos, pero solo 36.4 por ciento de los casos estuvieron controlados.
No obstante, el documento de la OPS también aborda desafíos ambientales y de salud mental. La contaminación del aire, por ejemplo, incrementa el riesgo de enfermedades cardiovasculares y respiratorias, y “las tasas de suicidio aumentaron un 17.4 por ciento desde el año 2000, con tres veces más muertes en hombres que en mujeres. N