Tijuana, B.C.- Rafael Orozco Vargas, fiscal regional en Baja California informó que los cuerpos de los dos migrantes de origen colombiano que resultaron muertos, el pasado 4 de noviembre, en un presunto enfrentamiento armado con elementos de Guardia Nacional en las inmediaciones de un cerro en el municipio de Tecate, ya fueron reconocidos, pero todavía no se han trasladado a su lugar de origen.
“Sí han sido reconocidos, se tiene comunicación ya con la autoridad colombiana. Lamentablemente no cuentan con familiares aquí y están en proceso para saber si se van a repatriar o el procedimiento para hacerlo”, refirió Orozco Vargas.
Según el Informe Policial Homologado (IPH) elementos de la Guardia Nacional dieron alcance a un par de vehículos en el que viajaban personas migrantes y presuntos traficantes de personas. Cuando observaron las unidades de la Guardia Nacional inició un intercambio de disparos que resultó en la muerte de los dos colombianos, sin embargo, la investigación no ha demostrado estos hechos.
El fiscal compartió que hay una camioneta involucrada en el hecho, la cual todavía no ha sido localizada, pero ya cuentan con las características de la misma. A la fecha no hay certeza de que los hechos ocurrieron como se describieron en el informe por lo que se continúa trabajando en la carpeta de investigación.
De igual manera, indicó que no hay elementos suficientes para asegurar que se trató de trata de personas. En cuanto al delito de tráfico de personas, recordó que la Fiscalía General del Estado (FGE) no está facultado para investigar estos delitos que son de orden federal.
El trabajo que realizan con la comunidad migrante suele estar enfocado a delitos del orden común de los que suelen ser presa por su estado de vulnerabilidad, como es el secuestro que se suele dar cuando los llamados “polleros” los privan de la libertad a cambio de más dinero, además del que ya pagaron para internarse en territorio estadounidense. N