En una celebración que fusiona la tradición con la modernidad, el corazón de Nueva York se llenará de la esencia de Puebla con la exhibición de dos icónicas Catrinas.
Desde el 28 de octubre, “La Monja” y “El Volador” serán las protagonistas en Times Square, una de las esquinas más emblemáticas del mundo.
Este evento no sólo destaca la riqueza cultural de Atlixco, sino que también refuerza los lazos entre los migrantes y sus raíces.
Delfino Jácome, Director de Mi Casa es Puebla en NY, busca llevar un pedazo de la tradición mexicana a la gran manzana.
“Es un honor representar a mi pueblo en un lugar tan significativo. Las Catrinas no sólo son figuras; son un símbolo de identidad y pertenencia para todos los que vivimos lejos de casa”, expresó Jácome.
VALLE DE CATRINAS
El Valle de Catrinas es una celebración que se realiza anualmente en Atlixco, un lugar donde el arte y la cultura se entrelazan en una explosión de colores y tradiciones.
Este año, “La Monja” y “El Volador” han sido seleccionados por su capacidad de evocar la historia y las costumbres de Puebla.
“La Monja” rinde homenaje a las mujeres que, a través de los siglos, han sido fundamentales en la creación del emblemático chile en nogada.
Por su parte, “El Volador” representa una de las danzas más ancestrales de la región, simbolizando la conexión entre lo terrenal y lo divino.
La decisión de exhibir estas figuras en Times Square no es trivial.
Este emblemático lugar recibe diariamente a más de 300 mil visitantes, lo que significa que, en un solo fin de semana, más de dos millones de personas tendrán la oportunidad de admirar el arte y la tradición de Puebla.
SEGUNDO AÑO DE LA INSTALACIÓN
Ya en 2023, figuras como “El Charro Negro” y “El Diablito” conquistaron el corazón de los neoyorquinos y mexicanos que residen en la ciudad, cimentando la presencia cultural de Atlixco en el extranjero.
A pesar del entusiasmo, la logística detrás de estas exposiciones no es sencilla. La presidenta municipal de Atlixco, Ariadna Ayala Camarillo, ha mencionado que, aunque la idea de que los residentes en Estados Unidos colaboren en la creación de Catrinas es atractiva, las complejidades logísticas han llevado a decidir lo contrario.
Cada figura monumental requiere de un meticuloso proceso que abarca desde el diseño inicial hasta la pintura final, donde artistas locales imprimen su sello distintivo.
Además de Nueva York, Los Ángeles también será testigo de la llegada de estas figuras, un destino que alberga a una significativa comunidad atlixquense. Sin embargo, los detalles sobre la exhibición en esta ciudad aún permanecen en reserva, lo que genera expectativas sobre la creatividad que se desplegará en esta segunda muestra.
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