Los resultados de las elecciones al Parlamento Europeo confirmaron este domingo 9 de junio el auge de la extrema derecha. El vendaval político provocó que esta línea ideológica se alzara victoriosa en países como Francia, Italia y Austria, mientras el instituto político alemán Alternativa para Alemania (AfD) quedó en segundo, por encima del Partido Socialdemócrata de Alemania (SPD) del canciller Olaf Scholz.
La extrema derecha también tuvo buenos resultados en Países Bajos. Pero expertos se mantienen cautelosos ante esos resultados. “La extrema derecha salió bien, pero no de forma excelente, no olvidemos que son elecciones de segundo orden“, explicó Francesco Nicoli, investigador invitado del centro de estudios Bruegel.
La elección de los 720 eurodiputados abre un nuevo ciclo en el Parlamento Europeo, y los nuevos legisladores designarán al nuevo presidente de la Comisión Europea, el brazo ejecutivo del bloque. “No podemos decir que sea un impulso muy, muy significativo”, señaló Christine Verger, del centro de estudios Jacques Delors. “Podría haber cambios dentro de los grupos políticos, no sabemos dónde terminarán algunos legisladores europeos”.
UNA BUENA NOCHE PARA VON DER LEYEN EN EL PARLAMENTO EUROPEO
Empero, la actual presidenta de la Comisión Europea y aspirante a un segundo mandato de cinco años, la alemana Ursula von der Leyen, salió fortalecida de las recientes elecciones europeas. El bloque político que defiende su candidatura, el del Partido Popular Europeo (PPE, derecha), se mantuvo como la principal fuerza en la Eurocámara.
En la noche del domingo, hablando como candidata, Von der Leyen celebró el resultado para el PPE y prometió construir un “baluarte” contra los extremos, tanto de la derecha como de la izquierda. Al fin de las elecciones en los 27 países del bloque, el nudo central del poder en el Parlamento Europeo se mantuvo: la coalición del PPE, los Socialdemócratas y los centristas liberales de Renew.
Este escenario parece allanar el camino de Von der Leyen a otros cinco años al frente de la Comisión, pero su candidatura aún tendrá que superar varios obstáculos, en especial en materia de apoyo político de los dirigentes europeos.
EL MAYOR PERDEDOR TRAS LAS VOTACIONES
El mayor perdedor de las elecciones fue el presidente de Francia, Emmanuel Macron, cuyo partido liberal fue apabullado por la Agrupación Nacional, encabezada por Marine Le Pen (extrema derecha). En respuesta, el mandatario disolvió este domingo el Parlamento y convocó a elecciones adelantadas.
“Francia sigue siendo un país grande con un presidente con mucho poder”, destacó Christine Verger, experto del centro de estudios Jacques Delors, quien señaló que Macron seguirá siendo un actor importante en Europa. Pero acotó que el mal resultado electoral de su partido lo llevaría a perder algo de influencia en el grupo Renovación, al que pertenece en el Parlamento Europeo.
“Confío en la capacidad del pueblo francés para tomar la decisión correcta para sí mismo y para las futuras generaciones. Mi única ambición es ser útil a nuestro país, que tanto amo”, escribió el mandatario en la red social X.
Francia amaneció conmocionada por el adelanto de los comicios previstos en 2027 al 30 de junio y 7 de julio próximos, tras la victoria del partido de extrema derecha Agrupación Nacional (RN) con 31.37 por ciento de votos en las europeas, uno de los mejores resultados de su historia.
En el caso de Alemania, el jefe de gobierno Olaf Scholz descartó convocar elecciones anticipadas, pese al revés de su coalición de socialdemócratas, ecologistas y liberales en los comicios, anunció este lunes 10 de junio su vocero.
RUSIA OBSERVA LAS ELECCIONES DEL PARLAMENTO EUROPEO
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, sigue “con atención” el auge de los partidos de extrema derecha en Europa y Francia, pese a que la “mayoría [del Parlamento Europeo] será proeuropea y pro-Ucrania”, anunció su vocero, Dmitri Peskov.
“Parece que, con el tiempo, los partidos de derecha le pisarán los talones [a los partidos proeuropeos] y nosotros seguimos este proceso con atención”, añadió. “Seguiremos todo ello con atención, y más aún dada la actitud extremadamente inamistosa, o incluso hostil, de los dirigentes franceses hacia nuestro país”, explicó el portavoz del Kremlin. N