El depuesto presidente de Níger, Mohamed Bazoum, permanece detenido junto con su esposa e hijo en el palacio presidencial de la capital, Niamey, en unas condiciones “inhumanas”, expuesto al calor y sin contar con acceso a agua o comida, lo que ha despertado grandes preocupaciones ante su progresivo deterioro de salud.
El Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Volker Turk, advirtió este viernes 11 de agosto que el edificio donde permanece detenido “arbitrariamente” el depuesto presidente nigerino no tiene agua potable ni electricidad.
“Informes fidedignos que recibí, indican que sus condiciones de detención podrían constituir un trato inhumano y degradante, en violación del Derecho Internacional”, apuntó en un comunicado Turk, agregando que Bazoum y su familia tampoco tienen acceso a medicación.
En los últimos días, varias organizaciones internacionales, entre las que destaca Human Right Watch (HRW), y gobiernos de países occidentales como Estado Unidos, se pronunciaron en contra de las acciones de la junta golpista y expresaron su preocupación por el deterioro de salud de Bazoum ante las altas temperaturas en el país.
ESPOSA E HIJO BAJAN CINCO Y DIEZ KILOS, RESPECTIVAMENTE
En una entrevista con el diario The Guardian, la hija del presidente, Zazia Bazoum, quien se encuentra actualmente en Francia, denunció que tanto su madre como su padre perdieron cinco kilos, respectivamente. En tanto, su hermano Salen, que tiene 22 años, perdió diez por falta de comida.
“No tiene carne ni verduras frescas, pero tienen arroz y pasta; ahora es lo único que comen, que no es bueno para su salud (…) No tienen agua limpia para beber y el gas para cocinar se terminará pronto también”, dijo.
Zazia también corroboró los informes del HRW de que la junta —liderada por el general nigeriano Abdourahmane Tchiani, antiguo jefe de la Guardia Presidencial—, impidió al personal médico el acceso al palacio. Esto pese a que Salem necesita recibir tratamiento por una afección cardiaca.
Además, resaltó que la falta de electricidad en el edificio, debido en parte a los cortes impuestos por la vecina Nigeria, es un movimiento “intencionado” de sus captores para “ejercer presión en su contra”, ya que en otros puntos de la capital hay energía.
Ante la posibilidad de que Tchiani libere a su padre, Bazoum se mostró escéptica. “A lo mejor dejan marchar a mi hermana y a mi madre, pero no creo que dejan ir a mi padre”, sentenció, dejando claro que las acciones de la junta son una tortura.
ADEMÁS DE ESTAR DETENIDO, BAZOUM SUMA AMENAZAS DE MUERTE EN NÍGER
Al deterioro de su salud, se suman también las amenazas de muerte de la junta militar, que aseguró que si la Comunidad Económica de Estados de África Occidental (CEDEAO) interviene militarmente en el país, no podrá garantizar la vida del presidente. Unas declaraciones que ya condenó el portavoz adjunto del secretario general de la ONU, Farhan Haq.
La CEDEAO acordó en la víspera la activación “inmediata” de una fuerza regional con vistas a una posible intervención militar en Níger para recuperar el “orden constitucional” tras el golpe de Estado perpetrado el pasado 26 de julio.
A pesar del ultimátum de la organización regional, que había hecho un llamado a la junta para resolver el conflicto por vía diplomática y pidió la restitución de Bazoum, el Consejo Nacional para la Salvaguarda de la Patria (CNSP) se consolidó en el poder con el nombramiento de altos cargos.
LOS LÍDERES DEMOCRÁTICOS CAEN
En contexto, el 26 de julio pasado, un grupo de la Guardia Presidencial nigeriana retuvo al entonces mandatario de Níger, Mohamed Bazoum, en el palacio presidencial junto a su familia. Acto seguido, declararon el fin de su mandato e instauraron una junta militar. Las potencias extranjeras condenaron el golpe, pero no hicieron nada, según describe un artículo del medio The New York Times.
Después Estados Unidos y Francia amenazaron con cortar las relaciones con Níger, poniendo en peligro millones de dólares de ayuda. Sin embargo, aunque Bazoum estaba detenido, en un inicio pudo hablar con los líderes mundiales y publicar mensajes en las redes sociales. Aunado a ello, países vecinos amenazaron con entrar en guerra, unos para frustrar el golpe de Estado y otros para garantizar el éxito.
De acuerdo con el medio estadounidense, si el golpe triunfa, Níger será el caso más reciente de una serie de países, desde el Atlántico hasta el mar Rojo, que están gobernados por juntas militares en África. Los líderes, que se eligieron democráticamente, están cayendo desde hace tres años; tres son vecinos de Níger: Malí, Burkina Faso y Guinea, que a su vez han sufrido cinco golpes de Estado. N
(Con información de Europa Press)