Un padre, condenado este martes 28 de marzo en Rusia a dos años de cárcel por criticar la ofensiva contra Ucrania y a quien se le retiró su hija por un dibujo antiguerra de la niña, está prófugo.
Esta caso ha suscitado una gran indignación en Rusia desde hace varias semanas, y se ha convertido en un símbolo de la represión contra los que se oponen a la operación militar lanzada hace más de un año contra Ucrania.
La historia se remonta al año pasado, cuando Maria Moskaleva, de 13 años, hizo un dibujo en la escuela en el que se ven misiles junto a una bandera rusa dirigidos contra una mujer y un niño al lado de una bandera ucraniana.
La directora de la escuela advirtió a la policía que detectó en las redes sociales comentarios del padre de la niña, Alexéi Moskalev, contra la ofensiva en Ucrania. Moskaliov, de 54 años, fue puesto en arresto domiciliario el 1 de marzo y su hija, enviada a una institución de menores. La madre está distanciada de la familia.
Sin embargo, este martes, la historia tuvo un giro dramático, cuando el tribunal de Yefrémov, a unos 300 kilómetros al sur de la capital rusa, anunció que Moskaliov había desaparecido.
“El veredicto fue leído en ausencia del acusado, porque ha huido y no se presentó a la audiencia”, declaró Elena Mijailovskaya, responsable del servicio de comunicación del tribunal.
Poco antes, la corte había declarado a Moskaliov culpable de haber “desacreditado” al ejército ruso y lo había condenado a dos años de prisión, la pena requerida por el fiscal.
EN YEFRÉMOV, LOS RESIDENTES ESTÁN CONMOCIONADOS POR LA HISTORIA DEL PADRE RUSO Y SU HIJA MENOR
Por el momento, las circunstancias exactas de su desaparición no trascendieron. Según una responsable del servicio de prensa del tribunal, “huyó la pasada noche”, de acuerdo con un video difundido por los medios rusos.
Su abogado, Vladimir Bilyenko, contactado por AFP, dijo estar muy sorprendido. “Lo vi ayer, pero hoy no estaba”, añadió. En otro juicio previsto el 6 de abril, Moskalev corre el riesgo de perder la autoridad parental.
A rally was held at the 🇷🇺 Consulate in New York🇺🇸 demanding schoolgirl Maria Moskaleva’s release. She was put into state custody after her dad was charged with “repeatedly discrediting the 🇷🇺 army”.
The cause of the family’s woes was her drawing a picture that said “No to war.” pic.twitter.com/6gZybvp7Zc
— Jason Jay Smart (@officejjsmart) March 14, 2023
Su abogado añadió que Maria Moskaliova había sido puesta bajo tutela y que podría ser “enviada a un orfanato de aquí a un mes”. En Yefrémov, los vecinos están divididos.
La localidad, de 37,000 habitantes, exhibe pintadas de apoyo patriótico a la campaña militar, como se observa en todo el país, pero los residentes también están conmocionados por la historia de este padre y su hija. El caso generó una petición nacional para que la menor vuelva al hogar con su padre.
Incluso Yevgueni Prigozhin, jefe del grupo paramilitar Wagner que participa en la ofensiva rusa, expresó apoyo a Maria y criticó a las autoridades locales por sus acciones.
“NO ACUSO A NADIE, VEO VÍCTIMAS EN LOS DOS LADOS”
En las calles de Yefrémov, pocos se atreven a hablar abiertamente del caso o a opinar sobre la campaña en Ucrania. “Separar al padre de su hija es horrible. Ella solo expresó un punto de vista”, comentó Alexandra, una estudiante. Una jubilada que declinó dar su nombre dijo que su vida cambió desde el 24 de febrero de 2022, día en que las fuerzas rusas entraron a Ucrania.
“No estoy acusando a nadie. Veo víctimas de ambos lados. Quiero que esto se acabe lo antes posible”, expresó. Alexander Salikhov, un ingeniero jubilado de 66 años, dijo querer la paz pero que “debemos liberar las tierras rusas” en Ucrania. Dmitry, un empresario de 50 años, señaló que cayó en bancarrota por las sanciones occidentales, que han golpeado la cadena de suministros.
“¿Qué nos guarda el futuro? El poder está en manos de los servicios de seguridad y estamos al borde de una guerra nuclear”, advirtió. N
(Con información de AFP)