Al menos 306 niños menores de cinco años murieron por hambre en Colombia en 2021, la mayoría en regiones pobres y apartadas, reveló la autoridad estadística del país en su informe más reciente.
La tasa de mortalidad por desnutrición fue de 7.8 por cada 100,000 menores de cinco años fallecidos en 2021, con respecto al 6.7 de 2020 (265 muertes), de acuerdo con un boletín del Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE). El departamento de Chocó (noroeste), de mayoría negra, fue el más afectado, con una tasa de 89. La Guajira (55.3) y Vichada (50.2), fronterizos con Venezuela y de alta presencia de pueblos indígenas, le siguen en el listado.
“La desnutrición de niños menores de cinco años es un flagelo que no deberíamos estar todavía reportando en el país. La Guajira y el Chocó han mantenido unos rezagos históricos que de nuevo reportamos para 2021”, lamentó en entrevista con Blu Radio la directora del DANE, Piedad Urdinola.
“Usualmente son causa de distribución “inequitativa) de la comida”, agregó.
A inicios de 2022, 7.3 millones de colombianos estaban en situación de inseguridad alimentaria, según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO). Casi el 40 por ciento de los 50 millones de habitantes vive en la pobreza, castigados por el desempleo (9.9 por ciento) y una de las tasas de informalidad más altas de América Latina (58 por ciento).
En el mismo informe, el DANE también alertó sobre el embarazo en menores de 14 años, que en 2021 fue de 3,884 niñas y adolescentes. Ese año “el número de nacimientos en niñas de 10 años aumentó poco más de 1,800 por ciento frente a 2020, pasando de 4 a 79”, precisó. De acuerdo a Urdinola, “el grueso de los padres son mayores de 20 años”.
COLOMBIA CON UNA DE LAS TASAS DE DESIGUALDAD MÁS ALTAS
Según la FAO, Colombia sigue teniendo una de las tasas de desigualdad más altas del mundo, con un coeficiente Gini de 53.5. En la actualidad, una de las mayores causas de la inseguridad alimentaria en el país no radica tanto en la escasez de alimentos. El problema recae en la imposibilidad de acceder a ellos. Parte de la explicación, conforme al organismo, se debe al bajo nivel de ingresos de la población vulnerable. Situación que se agudiza por las disfunciones de los sistemas agroalimentarios relacionados con el abastecimiento y distribución de alimentos.
De acuerdo con el informe “La seguridad alimentaria y la nutrición en el mundo” de la FAO, entre 702 y 828 millones de personas padecían hambre en 2021; 193 millones más entre 2019 y 2020, considerando el punto medio del rango estimado. Tras incrementarse hace dos años esta situación en África, América Latina y el Caribe y Asia, el hambre siguió aumentando en esas regiones para 2021.
Una de cada cinco personas en África (el 20.2 por ciento de la población) se enfrentaba al hambre en 2021. Lo anterior, en comparación con el 9.1 por ciento en Asia, el 8.6 por ciento en América Latina y el Caribe, el 5.8 por ciento en Oceanía y menos del 2.5 por ciento en América septentrional y Europa. N
