De acuerdo con los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades, se reportan más de 1,300 casos de viruela símica en Nueva York, mientras en todo Estados Unidos la cifra asciende a 5,189 contagios. Ante esas cifras, las autoridades neoyorquinas declararon la viruela del mono como una emergencia de salud pública, afirmando que la ciudad es el epicentro del brote.
“Estimamos que aproximadamente 150,000 neoyorquinos pueden estar actualmente en riesgo de exposición a la viruela del mono. Este brote debe abordarse con urgencia, acción y recursos, tanto a nivel nacional como mundial”, señalaron en un comunicado el alcalde, Eric Adams, y el comisionado de Salud, Ashwin Vasan.
En los últimos días, la gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, anunció la declaración de emergencia por desastre estatal. Mientras el departamento de sanidad apuntó a la viruela símica como una “amenaza inminente a la salud pública”.
San Francisco fue la primera ciudad en Estados Unidos en declarar una emergencia de salud local, tras un esfuerzo por fortalecer su respuesta en medio de casos que aumentan rápidamente y una gran demanda de la vacuna.
“Sabemos que este virus afecta a todos por igual, pero también sabemos que aquellos en nuestra comunidad LGBTQ corren un mayor riesgo en este momento”, dijo el pasado 28 de julio London Breed, alcalde de San Francisco, en un comunicado.
COMUNIDAD LGBT EN ESTADOS UNIDOS ENFRENTA LA VIRUELA DEL MONO Y EL ESTIGMA
La propagación de la viruela del mono y su prevalencia entre hombres homosexuales causa frustración y miedo. También levanta incertidumbres en una comunidad que aún carga las cicatrices del estigma durante los primeros años de la epidemia del sida. Aunque hay muchas interrogantes sobre la enfermedad. La mayoría abrumadora de los pacientes con viruela del mono en Estados Unidos se identifican como LGBTQ+ y son hombres.
Para algunos, la situación evoca aterrorizantes paralelismos con la década de 1980. Cuando el VIH sida fue visto como una “plaga gay” y hospitales y funerarias rechazaban a pacientes y víctimas, mientras funcionarios de la Casa Blanca hacían bromas homofóbicas o simplemente ignoraban el virus.
En una reunión esta semana en West Hollywood, barrio de Los Ángeles que se ha convertido en un bastión LGBTQ+, el actor Matt Ford recibió una calurosa ovación luego de narrar en detalle los “insoportables” síntomas que padeció al contagiarse con la viruela del mono. Su relato, inicialmente hecho en redes sociales, lo volvió una referencia en la comunidad.
“Tenía dudas antes de hablar públicamente sobre mi experiencia”, dijo a la AFP después del encuentro en el cual doctores y activistas intentaron despejar incertidumbres.
“Antes de tuitear, estaba indeciso por el estigma social y por la crueldad de las personas, especialmente en internet”.
Pero su deseo de “advertir” sobre la enfermedad previo a las celebraciones del Orgullo LGBTQ+ lo empujó a hablar. Los doctores recordaron que aunque la viruela del mono no ha sido clasificada como una enfermedad de transmisión sexual, sí puede transmitirse a través del contacto sexual. Siendo hombres que tienen relaciones sexuales con hombres los más afectados hasta el momento. N
(Con información de AFP)