UN ESTUDIO piloto realizado por la Federación Mundial de Obesidad estima que el impacto económico de la obesidad podría alcanzar una media del 3,6 por ciento del PIB anual en ocho países.
La investigación calcula que se prevé que los impactos económicos nacionales se dupliquen en 2060 si los líderes políticos y de salud pública de todo el mundo no toman medidas urgentes.
“La obesidad es un creciente desafío de salud pública en todo el mundo con importantes impactos económicos y de salud. Sin embargo, gran parte de lo que se sabe sobre los impactos económicos de la obesidad proviene de países de altos ingresos y los estudios no son fácilmente comparables debido a las diferencias metodológicas.
“Nuestro objetivo es demostrar un método para estimar los impactos económicos nacionales actuales y futuros de la obesidad y aplicarlo en una muestra de contextos heterogéneos a nivel mundial”, explica el documento publicado en BMJ Global Health.
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En términos per cápita, los costos de la obesidad en 2019 oscilaron entre 17 dólares en la India y 940 dólares en Australia. Estos costos económicos son comparables al 1,8 por ciento del producto interno bruto (PIB) en promedio en los ocho países, oscilando entre el 0,8 por ciento del PIB en la India y el 2,4 por ciento en Arabia Saudita.
Para 2060, sin cambios significativos en el statu quo, se prevé que los impactos económicos de la obesidad crezcan hasta el 3,6 por ciento del PIB en promedio, oscilando entre el 2,4 por ciento del PIB en España y el 4,9 por ciento del PIB en Tailandia.
“Reducir la prevalencia de obesidad en un 5 por ciento con respecto a los niveles proyectados o mantenerla en los niveles de 2019 se traducirá en una reducción anual promedio del 5,2 por ciento y el 13,2 por ciento en los costos económicos, respectivamente, entre 2020 y 2060 en los ocho países”.
Los hallazgos demuestran que los impactos económicos de la obesidad son sustanciales en todos los países, independientemente del contexto económico o geográfico, y aumentarán con el tiempo si continúan las tendencias actuales. “Estos hallazgos apuntan firmemente a la necesidad de promoción para aumentar la conciencia de los impactos sociales de la obesidad, y de acciones políticas para abordar las raíces sistémicas de la obesidad”.
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Entre 1975 y 2016, la prevalencia de la obesidad aumentó en todos los países del mundo. El sobrepeso y la obesidad contribuyen a numerosas enfermedades no transmisibles (ENT), incluidas las enfermedades cardiovasculares, la diabetes y el cáncer.
Las ENT relacionadas con la obesidad representan más de 5 millones de muertes en todo el mundo cada año, con más de la mitad de menos de 70,3 años. La pandemia de covid-19 también reveló la obesidad como un factor significativo en la morbilidad y mortalidad por enfermedades infecciosas.
“La obesidad es un complejo proceso de enfermedad crónica resultante de la interacción de varios factores, incluida la susceptibilidad genética, una nutrición alta densidad energética, la baja actividad física y el estrés”. N
