Los más de cincuenta movimientos que integran el Consejo Diocesano para el Apostolado de los Laicos de la Arquidiócesis de Puebla (CODAL), realizó un extrañamiento por la iniciativa de reforma al artículo 297 del Código Civil del Estado de Puebla, en la que se pretende modificar la definición de matrimonio y se elimina que debe ser “entre un solo hombre y una sola mujer”.
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Aseguran que no existe ningún fundamento para asimilar o establecer analogías, ni siquiera remotas, entre las uniones homosexuales y el designio de Dios sobre el matrimonio y la familia.
Coincidieron con la Arquidiócesis de Puebla, al señalar que la institución familiar, es por naturaleza solo la unión del hombre y la mujer, que se unen en una relación exclusiva, para acompañarse, procrear, vivir en unidad, ayudarse y educar a los hijos.
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Enfatizaron que como católicos respetan, acompañan, aceptan y aman a todo ser humano por el simple hecho de que es una creatura e hijo de Dios, y lo reconocen como hermano, pero respetan que, en las “uniones civiles” o “sociedades de convivencia” entre personas del mismo sexo, puedan tener acceso legal a la seguridad social, derechos laborales, etc.
Además, manifestaron su total apoyo a Mons. Víctor Sánchez Espinosa y a la Iglesia particular de la Arquidiócesis de Puebla, pues creemos firmemente en buscar el bien de todos y la paz social.