Serbia trasladará su embajada en Israel de Tel Aviv a Jerusalén y Kosovo establecerá relaciones y también abrirá su misión diplomática en la Ciudad Santa, siguiendo el ejemplo de Estados Unidos, anunció el viernes el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu.
“Agradezco a mi amigo el presidente de Serbia (…) la decisión de reconocer a Jerusalén como capital de Israel y por transferir la embajada de su país”, declaró en un comunicado Netanyahu, que precisó que esa mudanza tendrá lugar “de aquí a julio de 2021”.
Unos minutos después, los servicios de Netanyahu anunciaron el establecimiento de relaciones diplomáticas con Kosovo, que no mantenía lazos bilaterales con Israel desde la proclamación de su independencia de Serbia en 2008.
“Kosovo será el primer país de mayoría musulmana que abrirá una embajada en Jerusalén”, declaró el primer ministro israelí, citado en un comunicado.
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Poco después de los anuncios de Netanyahu, el secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erakat, reaccionó en Twitter asegurando que “Palestina se ha convertido en víctima de las ambiciones electorales de Trump”.
“Hará todo lo que sea para asegurar su reelección, poco importa si eso aniquila la paz”, escribió Erakat, en alusión a la presidencial prevista en noviembre en Estados Unidos.
Las decisión de Serbia, que no es miembro de la Unión Europea pero que será el “primer país” europeo que sigue el ejemplo de Estados Unidos, coincide con el anuncio de Trump el viernes de un acuerdo histórico entre Serbia y Kosovo de normalizar sus relaciones económicas.
“Serbia y Kosovo se comprometieron a favor de una normalización económica”, declaró Trump en el Despacho Oval, sin dar más precisiones sobre el alcance exacto del acuerdo.
Éxito diplomático
Con su decisión, Serbia sigue los pasos de Estados Unidos y Guatemala, que trasladaron sus embajadas de Tel-Aviv a Jerusalén en mayo de 2018, rompiendo un consenso internacional sobre la Ciudad Santa, y provocando la cólera de los palestinos.
Tradicionalmente, la mayoría de las misiones diplomáticas en Israel han estado en Tel Aviv, y los países se han mantenido neutrales sobre la disputada ciudad de Jerusalén.
Pero Trump rompió esta barrera en diciembre de 2017 al reconocer Jerusalén como capital de Israel y trasladar su embajada de Tel Aviv a la Ciudad Santa.
El estatuto de Jerusalén es en efecto uno de los temas más espinosos para la resolución del conflicto israelo-palestino.
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La ONU considera que esta cuestión debe ser objeto de un acuerdo entre israelíes y palestinos, y que mientras tanto los países no deben establecer en Jerusalén sus representaciones diplomáticas en Israel.
Israel se apoderó de Jerusalén Este en 1967, la anexionó y consideró el conjunto de la ciudad como su capital “eterna” e “indivisible”.
A su vez, los palestinos quieren hacer de Jerusalén Este la capital del Estado al que aspiran.
La noticia del Serbia llega menos de un mes después de que Emiratos Árabes Unidos e Israel anunciaran un acuerdo de normalización de relaciones, favorecido por la intervención de Estados Unidos, primer socio de Israel.
El acuerdo, que se espera que sea firmado en la Casa Blanca en las próximas semanas, sería el primer de Israel con una nación del Golfo y el tercero con un país árabe, después de los establecidos con sus vecinos Egipto en 1979 y Jordania en 1994.