Psicólogos advierten a padres y alarmistas del cambio climático sobre los estados de inquietud que pueden provocar en los infantes.
Por Benjamin Fearnow
UN GRUPO DE PSICÓLOGOS está advirtiendo a padres y tutores que no deben convertirse en alarmistas del cambio climático tras observar que cada vez más niños reciben tratamiento por “ecoansiedad”.
Investigadores de la Universidad de Bath y miembros de la Alianza de Psicología Climática (CPA, por sus siglas en inglés), en el Reino Unido, señalan que los niños suelen recibir una descarga de preocupaciones sobre el futuro del planeta y “el apocalipsis ambiental”.
En declaraciones realizadas esta semana a The Telegraph, los psicólogos señalan que un número cada vez mayor de niños y adultos jóvenes reciben tratamiento con medicamentos psiquiátricos para disminuir el estrés y el agotamiento emocional provocado por la “ecoansiedad” o el miedo ferviente de que los seres humanos se extingan como resultado de su propia contaminación y daño al ambiente.
Sin embargo, los miembros de la CPA afirman que no desean que el creciente fenómeno de la “ecoansiedad” en los niños sea clasificado como un trastorno mental debido a que se trata de un miedo “racional”, a diferencia de las causas que provocan la mayoría de los problemas de ansiedad convencionales.
Caroline Hickman, miembro del cuerpo docente de la Universidad de Bath y ejecutiva de la CPA, declaró este domingo a The Telegraph: “Los síntomas son los mismos [que los de la ansiedad clínica], los sentimientos son los mismos, pero la causa es diferente. El miedo se relaciona con el apocalipsis ambiental, con el hecho de que todos vamos a morir”.
Hickman añadió que los padres, a diferencia de los líderes políticos mundiales, deben hablar con sus hijos sobre el calentamiento global y los efectos del cambio climático provocado por los seres humanos, pero advirtió que no deben presentar estos temas como una condena a muerte para el género humano.
Hickman advirtió también que, cuando se les dice a los niños y a los adultos jóvenes que el cambio climático acabará con el género humano, los chicos se acercan a los expertos en salud mental con preguntas como: “¿Qué caso tiene ir a la universidad? ¿Qué caso tiene presentar mis exámenes?”.
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“Los padres deben encontrar palabras para hablar sobre el tema que resulten apropiadas para la edad de sus hijos y que no les resulten aterradoras”, continuó.
“Es necesario separar los hechos de aquello que se desconoce: dígales que algunas especies se están extinguiendo y que algunos seres humanos han resultado perjudicados, pero no les diga que todos vamos a morir, porque no es verdad”.
Adrian Tair, psicoterapeuta psicoanalítico y cofundador de la Alianza de Psicología Climática, ha aparecido en varios videos en los que informa a educadores, padres y otras personas sobre cómo “enfrentar verdades difíciles sobre el cambio climático y la crisis ecológica”.
La CPA ofrece una recomendación en cuatro etapas de la forma en que los padres deberían abordar las preocupaciones de sus hijos sobre el cambio climático.
El primer paso es presentar hechos conocidos sobre el tema y pedirles su respuesta antes de asustarlos con cualquier afirmación de que la extinción humana será el resultado final.
El último paso es proponer a los niños pasos tangibles y cotidianos para disminuir la emisión de gases de efecto invernadero y la contaminación.
La CPA sugiere hablar sobre disminuir los desperdicios no reciclables, tomar mejores decisiones de alimentación y reducir el consumo de energía eléctrica en toda la casa.
En 2017, la Asociación Psicológica Estadounidense publicó un informe en el que analizaba el “duelo climático”, y existe un creciente número de instigaciones sobre cómo los efectos tangibles del cambio climático, combinados con un número cada vez mayor de llamados a la acción, afectan el sentido de humanidad e identidad de los seres humanos.
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La creciente visibilidad de los efectos del cambio climático, escriben los investigadores, produce sentimientos de depresión, ansiedad e impotencia frente a una posible extinción.
Gran parte de la investigación mencionada busca “mitigar la carga de agotamiento emocional” de las personas preocupadas por el cambio climático.
En el estudio se señala que, en 2015, la Organización Mundial de la Salud (WHO, por sus siglas en inglés) “estableció el marco para construir sistemas de salud resistentes a los fenómenos climáticos”, y mencionó que hacer más énfasis en “el llamado global a la acción para disminuir el cambio climático” tiene un impacto psicológico en los niños y adultos de todo el mundo.
En una encuesta de CBS publicada en días recientes se encontró que un número mayor de estadounidenses confían más en “sus propias observaciones” sobre el cambio climático que en la investigación científica o en los meteorólogos. Sin embargo, la mayoría (56 por ciento) señala que quieren acciones “inmediatas” para frenar sus efectos.
Una solicitud realizada por Newsweek a la Alianza de Psicología Climática para recibir información adicional sobre la forma en que los padres deben hablar del cambio climático con sus hijos o con otros adultos jóvenes no había sido respondida en el momento de escribir este artículo.
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Esta nota forma parte del proyecto Covering Climate Now (Cubrir el Cambio Climático Ahora), de Columbia Journalism Review.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek