El estado de Nuevo León tiene una urbe donde la percepción de inseguridad sobrepasa el 81%, además de otras cuatro donde la percepción de inseguridad sobrepasa el 46%, lo cual deja al estado como una de las más bajas en lo que a percepción de seguridad urbana se refiere.
El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) presentó los resultados de su Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) correspondiente al cuarto trimestre de 2018, en la cual, los mexicanos encuestados declaran cuál es su percepción en cuestión de seguridad dentro de su comunidad y los lugares que frecuentan, como cajeros automáticos, escuelas, mercados o el transporte público.
No obstante, no en todas las ciudades se presenta el mismo resultado. Algo que destaca en esta nueva entrega de la ENSU es el declive en sus indicadores de precepción de inseguridad a partir de la realizada en el tercer trimestre de 2018, sin embargo, aunque parece un panorama alentador, las cifras oficiales siguen siendo alarmantes.
Para Nuevo León, el municipio de Monterrey presenta un incremento importante en la percepción general de inseguridad, ya que pasó de 79.7 a 84.8% de la población que percibe mayores niveles de inseguridad en México en un trimestre, lo que equivale a un aumento de 5.1 puntos porcentuales.
En lo que respecta al municipio de San Nicolás de los Garza, este presentó un incremento aún más drástico, ya que en la encuesta realizada para el tercer trimestre de 2018 se registró un 34.2% en percepción de inseguridad, mientras que para esta entrega se registró un total de 44.8%, un aumento de más de nueve puntos porcentuales en tan solo tres meses.
Estas cifras responden a la escalada de violencia que se vivió durante el año pasado, además de los casos de fosas clandestinas y los secuestros que se presentaron en el estado y las constantes salidas de la Secretaría de Seguridad estatal durante la gestión de Jaime Rodríguez Calderón.
Otros ejemplos del aumento de la percepción de inseguridad en el estado son los municipios de Santa Catarina, Escobedo, San Pedro Garza García y Guadalupe, donde las cifras presentaron aumentos entre cuatro y un punto porcentual en cuanto a este tema.
Sin embargo, no todos los municipios presentan la misma tendencia. En lo que concierne al municipio de Apodaca, la percepción de inseguridad fue a la baja, ya que el 59.5% de los mayores de 18 años indicaron que percibían inseguridad en su comunidad, .5 puntos porcentuales menos que el trimestre anterior.
El mismo caso se puede observar en el municipio de Guadalupe, donde el 62.3% indica que se siente inseguro, apenas .1 puntos porcentuales menos que el trimestre anterior.
En lo que respecta a los conflictos locales, la ciudad de Monterrey y los municipios de San Pedro Garza García, Guadalupe, Escobedo y Santa Catarina registraron un aumento en la existencia de conflictos, pasando de 29.1%, 19.5%, 17.2%, 21.1% y 22.2% en el tercer trimestre a 33.1, 20.3, 24.1, 24, y 28.1, respectivamente, en diciembre. Caso distinto para los municipios de Apodaca y San Nicolás de los Garza, donde disminuyó la existencia de conflictos.
Asimismo, los ciudadanos también muestran dudas en su gobierno para que este tenga la capacidad de resolver conflictos que se presenten en la comunidad. El municipio con la percepción más baja de la capacidad del gobierno para resolver sus problemas es el de Monterrey, donde únicamente el 19.3% de los pobladores considera que su gobierno es apto para este fin, seguido de Guadalupe, San Pedro Garza García, Santa Catarina, San Nicolás de los Garza y Escobedo, quienes registraron un 35.4, 37.5, 44.2, 44.4 y 45.2% de confianza en sus autoridades.
Esta tendencia de confianza es perceptible tanto en Nuevo León como en otras entidades del país, no obstante, como se mencionó anteriormente, las cifras siguen siendo altas. La llegada de un nuevo gobierno, tanto en el ámbito federal como estatal, trajo un aliento positivo a las personas hacia el futuro, por lo que es importante que estos nuevos gobiernos puedan cumplir con las expectativas de sus habitantes.