La guerra de Donald Trump contra los medios de comunicación se intensificó durante 2018, el mandatario no perdió oportunidad de tuitear contra los medios y en repetidas ocasiones los culpó de “generar violencia”, “división y odio” y “enojo social” por las fake news.
La información de la prensa crítica de la administración del magnate fue desacreditada desde las primeras semanas de enero cuando anunció los Fake News Awards, los premios para las noticias falsas donde CNN fue el que recibió más galardones, seguido de The New York Times, The Washington Post, TIME, Newsweek y ABC.
Sin embargo, los ataques no pararon en redes sociales:
En la conferencia de prensa de las elecciones intermedias realizadas en noviembre, el periodista de CNN Jim Acosta le preguntó al mandatario por qué calificó como invasión a los migrantes que buscan llegar a Estados Unidos.
“Honestamente, creo que deberías dejarme dirigir el país. Diriges CNN, y si lo hicieras bien, tu raiting sería más alto” respondió Trumpy pidió que se le retirará el micrófono al reportero.
Horas más tarde la Casa Blanca anunció que la acreditación del periodista sería retirada. Dos semanas después un juez federal ordenó entregar la credencial a Acosta como resultado de una demanda emitida por CNN.
Días después del enfrentamiento con Acosta, Abby Phillip, también reportera de CNN fue señalada por Trump por hacer “preguntas estúpidas” luego de que durante una rueda de prensa la periodista cuestionara si quería que el nuevo fiscal, Matthew Whitaker, detuviera la investigación sobre la injerencia rusa en la campaña de 2016.
Trump se negó a responder y agregó: “qué pregunta más estúpida, qué pregunta más estúpida. Pero te observo mucho. Haces muchas preguntas estúpidas”.
En octubre una reportera Cecilia Vega de la cadena ABC News recibió comentarios desfavorables por parte del presidente durante una conferencia de prensa en el Jardín Rosa de la Casa Blanca sobre el acuerdo comercial entre México, Estados Unidos y Canadá.
Trump le dio la palabra y mientras ella tomaba el micrófono él murmuró sonriendo “Está sorprendida de que la haya elegido. Está en estado de shock”.
Vega contestó negativamente y le dió las gracias por cederle la palabra, Trump contestó “No pasa nada. Sé que no estás pensando. Nunca lo haces”.
Después se negó a contestar su pregunta sobre la investigación del FBI al juez Brett Kavanaugh, su candidato a la Corte Suprema acusado de agresión sexual.
En agosto el The Boston Globe lideró la publicación de editoriales para responder a los ataques de Donald Trump con la campaña #EnemyofNone.
Más de 200 diarios de Estados Unidos participaron, The New York Times, por ejemplo, resaltó que “insistir que las verdades que no te gustan son ‘noticias falsas’ es peligroso para la sangre de la democracia”.
Esta campaña surgió luego de que en repetidas ocasiones Trump tuiteara que la prensa y sus fake news son “enemigos del pueblo”.
