El acuerdo firmado el jueves entre el presidente Donald Trump y el líder norcoreano Kim Jong Un dejó muchas preguntas en el aire sobre cómo los dos países buscarán la desnuclearización, según un informe clasificado del gobierno israelí.
El informe del ministerio del exterior israelí también dice que la administración de Trump dio marcha atrás en muchas de las exigencias que dijo haría en la víspera de la reunión con Kim, según algunos de los puntos más destacables del documento clasificado y publicado por Axios.
“A pesar de las sonrisas en la cumbre, muchos en Japón, Corea del Sur y el Congreso de EE UU dudan que las intenciones de Corea del Norte sean sinceras. Nuestra valoración es que a pesar de las declaraciones del presidente Trump sobre los cambios rápidos que se esperan en Corea del Norte, el camino a un cambio verdadero y sustancial, si es que se da, será largo y lento”, indicó el informe.
El documento también señaló que la decisión de Trump de detener los ejercicios militares conjuntos entre EE UU y Corea del Sur durante la desnuclearización, una propuesta conocida como “congelar para congelar”, fue un giro de 180º a la postura anterior de Washington. China propuso esta opción el año pasado y fue rechazada completamente por la administración de Trump.
La valoración parece ser acorde con la de muchos expertos en Corea del Norte, quienes dicen que el acuerdo entre la administración de Trump y el régimen de Kim Jong Un contiene muy pocos planes concretos de acción. Los expertos también señalaron que los dos regímenes posiblemente tengan ideas muy diferentes de lo que significa una desnuclearización.
Corea del Sur, que vive bajo la amenaza constante de un ataque de Corea del Norte, ha fortalecido sus fuerzas militares después de la reunión. Seúl pronto finalizara la compra de aeronaves furtivas F-35A a Lockheed Martin.
Mientras tanto, investigadores han expresado sus dudas sobre la afirmación de Trump de que Corea del Norte destruirá una de sus instalaciones principales de ingeniería de pruebas de misiles.
“El presidente Kim me dijo que Corea del Norte ya está destruyendo un importante sitio de ingeniería de pruebas de misiles”, dijo Trump después de la cumbre en Singapur el 12 de junio, sin dar detalles de qué sitio Kim había prometido desmantelar. Pero un análisis del grupo de monitoreo 38 North reveló que todavía no hay evidencia de que Corea del Norte esté destruyendo algo.
“38 North ha llevado a cabo un sondeo de las instalaciones norcoreanas de cohetes y de lanzamiento e ingeniería de pruebas de misiles usando imágenes satelitales de alta resolución y todavía no ha identificado alguna actividad asociada con el desmantelamiento de instalaciones en Sohae o algún otro sitio de prueba en Corea del Norte”, dijo el informe.