El gobierno de Estados Unidos emitió este miércoles una advertencia a todos sus ciudadanos en China, después de que un diplomático de la embajada sufriera una lesión cerebral traumática como resultado de “sensaciones anormales de sonido y presión”.
El funcionario fue diagnosticó con una afección que se asemeja a los llamados “ataques sónicos” contra diplomáticos de los EE. UU. en Cuba el año pasado.
“Un empleado del gobierno de EE. UU. en China informó recientemente sutiles y vagas, pero anormales, sensaciones de sonido y presión”, dice la alerta de salud del gobierno publicada en la página web de la embajada. “Actualmente no sabemos qué causó los síntomas informados y no conocemos ninguna situación similar en China, dentro o fuera de la comunidad diplomática”.
El gobierno estadounidense advierte a sus ciudadanos que si experimentan “cualquier fenómeno auditivo o sensorial agudo inusual acompañado de ruidos penetrantes, no intente localizar su origen. En su lugar, muévase a un lugar donde los sonidos no estén presentes”.
Aunque los detalles sobre la condición del empleado de Guangzhou no están claros, Jinnie Lee, una portavoz de la embajada de los EE. UU. en Beijing confirmó que el personal había experimentado varios síntomas de salud física durante el año pasado, informó el Washington Post. “El gobierno chino nos aseguró que también están investigando y tomando las medidas apropiadas”, dijo.
La lesión cerebral del diplomático es “muy similar” a la que se registró con personal estadounidense en Cuba, afirmó este miércoles ante el Congreso el secretario de Estado, Mike Pompeo.
“Las indicaciones médicas son muy similares y totalmente consistentes con las indicaciones que tuvieron lugar con estadounidenses trabajando en Cuba”, dijo Pompeo ante el Comité de Relaciones Exteriores de la Cámara de Representantes.
Pompeo dijo a los legisladores que los peritos están “trabajando para descubrir qué ocurrió tanto La Habana como en China”.
Este caso presenta notables paralelismos con el que sacudió las relaciones de Estados Unidos con Cuba, después que 24 empleados de la embajada en La Habana fueron víctimas de lo que inicialmente se llamó “ataques sónicos” o “acústicos”.
Hasta ahora las investigaciones realizadas por peritos estadounidenses no han permitido descubrir la causa ni los medios de los llamados “ataques” en Cuba.
No obstante, Estados Unidos redujo su personal en Cuba a su mínima expresión y responsabilizó al gobierno cubano por fracasar en garantizar la integridad física del personal diplomático en su territorio.
Cuba ha negado cualquier responsabilidad en los episodios, y una investigación realizada en la isla cuestionó que tales ataques hayan realmente ocurrido.
El gobierno de Canadá también informó que diez de sus empleados en Cuba experimentaron los mismos síntomas, pero el asunto no ha afectado la relación bilateral.
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Con información de Christina Zhao/ Newsweek y AFP