Sara Elizondo I Pachuca
A lo largo de sus 18 años de edad, Valeria ha tenido crisis convulsivas por epilepsia refractaria. Para su madre, Patricia Obregón Montes, el uso de cannabis medicinal representa esperanza para una mejor calidad de vida.
La familia, oriunda de Cuautepec de Hinojosa, tuvo un primer acercamiento con este tipo de tratamiento, para el cual hizo la solicitud correspondiente ante la Comisión Federal para la Protección Contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) en 2016; sin embargo, los resultados no fueron favorables, por lo que quieren intentar con otras opciones.
“Valeria tiene Síndrome de Lennox Gastaut, por lo que ha debido tomar muchos medicamentos desde que nació. Nosotros ya habíamos escuchado que el cannabis era la alternativa para la epilepsia refractaria”, dijo a Criterio Obregón Montes.
“Verla convulsionar diario, a pesar de tomar cuatro medicamentos en la mañana y cuatro en la noche, amerita buscar todas las alternativas posibles. Ella es candidata a mariguana medicinal, pues no responde a la medicina convencional”, afirmó.
La mamá de Valeria señaló que la Fundación Grace ayudó con la autorización de la importación del medicamento cuyo costo es de 7 mil pesos, por lo que debió hacer rifas y otras actividades para reunir el dinero suficiente. En cambio, dijo, si la investigación y producción estuviera permitida, la cantidad de recursos sería menor.
“La alternativa es THC para casos de difícil control para disminuir las crisis, y para tenerlo debes sacar un amparo”, dijo.
PROTESTAN PARA LEGALIZAR MARIGUANA TERAPÉUTICA
Este fin de semana, padres de familia, pacientes y organizaciones de la sociedad civil se manifestaron en diferentes urbes del país, entre ellas la Ciudad de México, para exigir que la Cofepris presente el reglamento del decreto para legalizar la mariguana para el uso terapéutico.