El líder norcoreano Kim Jong Un y el presidente surcoreano Moon Jae-in celebraron este viernes una histórica cumbre en la que se comprometieron a trabajar por la desnuclearizaciónde la península. Para que no ocurriera ningún percance, funcionarios de ambos países trabajaron durante semana para garantizar que cada una de las necesidades de sus líderes fueran atendidas.
En el caso de Kim, una preocupación específica es dónde podrá liberarse de la tensión que lo rodea en este tipo momentos. Para ello tiene un retrete privado con el que viaja a todas partes, según declaraciones de un desertor norcoreano realizadas al Washington Post.
“En lugar de utilizar un baño público, el líder de Corea del Norte tiene un retrete personal que lo sigue cuando viaja”, dijo Lee Yun-keol, un biólogo que trabajó en una unidad de comando de la guardia norcoreana antes de ir a Corea del Sur en 2005, donde dirige el Centro de Servicio de Información Estratégica de Corea del Norte, con sede en Seúl.
La necesidad de Kim de un retrete portátil se dio a conocer por primera vez en 2015 en un artículo publicado en Daily NK, una publicación con sede en Seúl que trabaja con una red de desertores anónimos y fuentes internas en Corea del Norte, que describió a este artefacto como un “baño móvil sigue al líder cuando viaja”.
Según las fuentes de Daily NK, el retrete solo lo puede usar él en virtud de su estado jerárquico superior, pero también para que sea más fácil recolectar las muestras necesarias para controlar su salud.
Lee le dijo al Post que la razón médica es, de hecho, la principal preocupación para mantener el secreto del retrete móvil de Kim. “Las excreciones del líder contienen información sobre su estado de salud que no quiere dejar atrás”.
Jeffrey Lewis, director del Programa de No Proliferación de Asia Oriental en el Instituto Middlebury de Estudios Internacionales en Monterey, California, quien una vez escribió una “modesta propuesta” irónica para golpear el baño de Kim ––en burla de quienes propusieron un ataque preventivo contra Corea del Norte–– confirmó que el miedo al espionaje a través de los excrementos es bastante razonable.
“Sabemos que las agencias de inteligencia de todo el mundo están monitoreando la salud de los líderes extranjeros”, escribió en un artículo de 1,300 palabras sobre el tema en 2016 para la revista Foreign Policy, que compartió en Twitter el miércoles.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation whit Newsweek