
Este 6 de agosto se cumplen 30 años de uno de los momentos más relevantes en la historia política reciente de Aguascalientes: la llegada del Partido Acción Nacional (PAN) al poder local en 1995, en lo que fue la primera gran alternancia democrática en el estado tras décadas de dominio priista.
Aquel año, el PAN logró triunfos en la capital, en municipios como Calvillo, Cosío y Rincón de Romos, así como una mayoría en el Congreso local. El cambio fue interpretado por muchos como un parteaguas en la vida pública de Aguascalientes, en sintonía con las transformaciones políticas que ocurrían a nivel nacional.
Treinta años después, el PAN conmemora ese acontecimiento como el inicio de un ciclo que (según sus dirigentes) redefinió la forma de hacer gobierno en el estado.
“Fue una decisión ciudadana que transformó el rumbo político y fortaleció la democracia”, declaró este miércoles Javier Luévano Núñez, presidente estatal del partido.
En 1995, Alfredo Reyes Velázquez se convirtió en el primer presidente municipal de Aguascalientes emanado de un partido distinto al PRI, marcando un hecho histórico en la política local. Su elección representó un cambio en la configuración del poder en el estado y dio inicio a una etapa de alternancia que modificó el panorama político regional en las décadas siguientes.
En un comunicado, el partido señala que” Aguascalientes se convirtió así en un bastión del panismo nacional, refrendando desde entonces su confianza en los gobiernos emanados de Acción Nacional, que han sido reconocidos por su estabilidad, planeación, cercanía y capacidad de respuesta ante las demandas sociales”.