La reciente victoria de Zohran Mamdani en las primarias demócratas por la alcaldía de Nueva York ha desatado una tormenta política. El New York Young Republican Club (NYYRC) pidió este jueves al gobierno federal revocar su ciudadanía y deportarlo, argumentando que representa una amenaza para la ciudad.
Mamdani, un asambleísta estatal de 33 años, derrotó al exgobernador Andrew Cuomo con el 43.5 % de los votos frente al 36.4 % que obtuvo el veterano político, según cifras de The Associated Press. El resultado fue uno de los más relevantes desde que Donald Trump regresó a la Casa Blanca, y ha sido interpretado como un termómetro de la fractura ideológica dentro del Partido Demócrata.
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EL TRIUNFO DE MAMDANI INCOMODA A LOS CONSERVADORES
La victoria de Mamdani —musulmán, de origen indio y nacido en Uganda— lo perfila como el posible primer alcalde musulmán y sudasiático de la ciudad más grande de Estados Unidos. Su discurso progresista, que incluye propuestas sobre vivienda asequible y reforma policial, ha encendido alarmas en sectores conservadores.
El NYYRC escribió en X (antes Twitter):
“El radical Zohran Mamdani no puede ser permitido para destruir nuestra amada ciudad. La Communist Control Act permite al presidente Trump revocar su ciudadanía y deportarlo de inmediato. Es hora de actuar”.
Aunque la Ley de Control Comunista, firmada en 1954 por el presidente Dwight Eisenhower, prohibió formalmente al Partido Comunista en Estados Unidos, su aplicación ha sido simbólica y limitada por desafíos legales. Aun así, miembros del círculo cercano a Trump como Stephen Miller, asesor de Seguridad Nacional, y Tom Homan, zar fronterizo, han sido invocados por el club como figuras clave para hacer cumplir esta petición.
Miller calificó la victoria de Mamdani como “el ejemplo más claro de lo que sucede cuando una sociedad fracasa en controlar la migración”. Por su parte, Trump publicó en Truth Social que Mamdani es un “lunático comunista al 100 %”.
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ATAQUES POR SU ORIGEN Y CIUDADANÍA
Mamdani emigró a Nueva York con su familia en 1998, cuando tenía siete años. Se naturalizó como ciudadano estadounidense en 2018. Ese dato ha sido utilizado por figuras republicanas para cuestionar su legitimidad como candidato.
La concejal neoyorquina Vickie Paladino, del Partido Republicano, declaró:
“Es una locura elegir a alguien para un cargo mayor cuando ni siquiera ha sido ciudadano por diez años, y encima odia todo lo que representa este país. Deportación”.
Aunque su equipo reconoció que Mamdani no es elegible para deportación al ser ciudadano naturalizado, alegaron que “bajo la política actual, Mamdani probablemente habría sido removido del país antes de obtener la ciudadanía debido a su supuesta participación en organizaciones antisemitas y de extrema izquierda durante su etapa universitaria”. Mamdani ha negado enfáticamente estas acusaciones.
En respuesta, el propio Mamdani escribió en X:
“Como casi el 40 % de los neoyorquinos, no nací en este país. Llegué a los 7 años. Es mi hogar y estoy orgulloso de ser ciudadano, lo que significa defender la Constitución. Quizá la concejal Paladino debería leerla”.
IMPLICACIONES NACIONALES Y ELECTORALES
El triunfo de Mamdani llega en un momento de fuerte debate interno dentro del Partido Demócrata, que sigue dividido tras perder la presidencia en 2024. Para la Casa Blanca, la victoria de un perfil como Mamdani es vista como un reflejo del descontrol migratorio y ha sido utilizada estratégicamente para reforzar su enfoque restrictivo en política fronteriza.
Según el sitio de apuestas Polymarket, Mamdani tiene una probabilidad del 73.6 % de ganar la alcaldía en noviembre, muy por encima del actual alcalde Eric Adams, quien buscará la reelección como independiente y ha quedado en segundo plano tras el colapso de las acusaciones de corrupción en su contra.
¿QUÉ SIGUE?
La elección por la alcaldía de Nueva York está programada para el 4 de noviembre de 2025. Mientras Mamdani fortalece su base progresista, los ataques desde el flanco republicano no cesan, alimentando una narrativa de confrontación que podría marcar el tono de la campaña electoral en la ciudad y el país.
Con una ciudadanía ya consolidada y un respaldo creciente entre los votantes jóvenes y de comunidades migrantes, Zohran Mamdani se perfila como una figura clave en el futuro inmediato de la política urbana estadounidense —con aliados y detractores que ya lo colocan en el centro del debate nacional. N
