Los humanos no son la única especie que practica el “sexo seguro”, también los pulpos siguen esta medida. De acuerdo con un grupo de biólogos marinos de Australia, los pulpos machos de líneas azules (Hapalochlaena fasciata) dan una mordedura inyectada de veneno a las hembras antes del apareamiento, pero ¿por qué lo hacen?
Según los investigadores, las hembras de la especie tienden a tener el doble de tamaño que los machos y son propensas a comerse a sus parejas si se les da la oportunidad.
“Envenenar a las hembras las deja inmóviles, lo que permite a los machos aparearse con éxito”, sostuvieron los biólogos en el artículo publicado en Current Biology.
El veneno que utiliza el pulpo de líneas azules es la “tetrodotoxina”, más conocida como el veneno mortal que se encuentra en el pez globo, cuya carne se considera un manjar, pero que puede matar si no se prepara adecuadamente.
¿EL VENENO LO PRODUCEN LOS PULPOS?
La tetrodotoxina es capaz de paralizar a sus presas. En experimentos de apareamiento en laboratorio, los investigadores observaron que los pulpos de líneas azules machos utilizan un mordisco para inyectar saliva cargada de tetrodotoxina en las aortas de sus parejas para evitar ser canibalizados. El veneno utilizado en esta táctica no lo produce el propio pulpo, sino que se deriva de bacterias simbióticas que viven dentro de su cuerpo.
Al monitorear la frecuencia respiratoria de los pulpos machos y hembras durante el apareamiento, el equipo informó que la respiración de las hembras tendía a disminuir bruscamente cuando comenzaba el apareamiento, cesando por completo después de unos ocho minutos.
“En este estado parecido a la asfixia, el color del cuerpo de la hembra se volvió pálido. Las pupilas también se contrajeron, perdiendo todos los reflejos a los destellos de luz brillante, síntoma de una pérdida del control nervioso como ocurre durante el envenenamiento por tetrodotoxina”, señalaron los investigadores.
Y agregaron al tema: “Una vez que las hembras fueron inmovilizadas, los machos copularon con éxito y el apareamiento terminó cuando las hembras recuperaron el control de sus brazos y empujaron a los machos”.
LAS HEMBRAS PUSIERON HUEVOS EN UN PLAZO DE ENTRE 3 Y 29 DÍAS
A tenor de los especialistas, ninguna de las hembras murió en los experimentos por las mordeduras de los machos. Esto sugiere que tienen cierto grado de resistencia a la toxina. Es una capacidad vital para las especies que usan veneno para someter a sus presas y por lo tanto corren el riesgo de envenenarse accidentalmente.
Todas las hembras observadas en el estudio pusieron huevos en un plazo de entre 3 y 29 días. Esta estrategia de apareamiento asistida por veneno no es exclusiva de los pulpos de línea azul.
Muchas especies de pulpos machos más pequeños también han desarrollado otros medios para mitigar los peligros del canibalismo sexual. Algunos, por ejemplo, utilizan un brazo alargado y modificado para transferir esperma a sus parejas desde la distancia, lo que minimiza el riesgo de ser devorados por hembras más grandes. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek)