DE TIEMPO Y CIRCUNSTANCIAS
El lunes 3 de febrero tres barcos de guerra estadounidenses se instalaron en aguas internacionales frente a la costa de Ensenada, Baja California, México. La acción de Estados Unidos responde a la amenaza que el presidente recién electo de ese país, Donald Trump, profirió desde su campaña: utilizar fuerzas militares para desaparecer a los cárteles mexicanos.
Pero atrás hay una historia de descortesías de AMLO, que van desde una recepción descuidada a la entonces vicepresidenta de Estados Unidos, hasta el permitir que el Cártel de Sinaloa invadiera con fentanilo las ciudades más importantes de la costa del Pacífico.
Si esto no fuera suficiente, Andrés Manuel López Obrador invitó a las fuerzas armadas cubanas, rusas, norcoreanas, nicaragüenses, venezolanas y chinas a desfilar el 16 de septiembre —día patrio en México— durante varios años y, por supuesto, mostrar su afinidad con ellos. Al hacerlo, López Obrador dio pie a suponer que pudo fomentar complots antiestadounidenses por parte de cualquiera de esos países o incluso un presunto complot de fentanilo del gobierno chino. Todo esto lo pasó por alto la administración de Joe Biden, pero Marco Rubio, el nuevo secretario de Estado de Estados Unidos, hizo un cuidadoso archivo de todo ello.
El anterior presidente demócrata, Joe Biden, dejó crecer el problema, pues centró su interés en la migración suponiendo que ese era el quid para ganar las elecciones. Y no se percató, o no quiso percatarse, del problema económico que el tráfico de fentanilo estaba creando en su país.
¿AMLO APOYÓ AL CÁRTEL DE SINALOA?
Hoy el asunto es un tema de interés nacional en Estados Unidos del que emerge el apoyo que AMLO le dio al crimen organizado, particularmente, al Cártel de Sinaloa. Y para subrayarlo, la Casa Blanca declaró que hay una alianza entre nuestro gobierno y los cárteles de la droga mexicanos.
El comunicado, publicado como “Fact Sheet: President Donald J. Trump Imposes Tariffs on Imports from Canada Mexico and China” (Hoja de hechos: el presidente Donald J. Trump impone tarifas a las importaciones de Canadá, México y China), dice en un apartado:
“Adicionalmente, las organizaciones de tráfico de drogas mexicanas tienen una alianza intolerable con el gobierno de México. El gobierno de México ha facilitado paraísos de seguridad a los cárteles para la fabricación y el transporte de peligrosos narcóticos, que en conjunto han propiciado la sobredosis y muerte de cientos de miles de víctimas estadounidenses. Esta alianza pone en riesgo la seguridad nacional de Estados Unidos y debemos erradicar la influencia de estos peligrosos cárteles”.
Hasta ahora la diplomacia estadounidense se había regido por la teoría del gran garrote, nombre que surgió de un discurso del presidente Theodore Roosevelt en el año 1900, cuando dijo: “Habla suavemente y lleva un gran garrote”.1 Arturo Sarukhan2 publicó un artículo en la revista Americas Quarterly en el que dice que la diplomacia estadounidense ha cambiado su lema y que ahora reza: habla fuerte y lleva un gran garrote.
Bajo este lema la Casa Blanca, sin ambages, señala al Estado mexicano de ser un narcoestado. Acusación que hasta ahora no se había proferido desde esa instancia.
¿QUÉ DICE LA INVESTIGACIÓN DE THE SPECTATOR?
Peor aún, la revista británica The Spectator,3 en un artículo de Joshua Treviño que comenta la carta antes mencionada, acusa directamente a AMLO de controlar la política del Estado mexicano, de estar en la nómina del Cártel de Sinaloa, de haber visitado frecuentemente el cuartel general del Cártel de Sinaloa durante los seis años que fue presidente, de mostrarle una deferencia inusual a la mamá del Chapo Guzmán, de liberar a Ovidio Guzmán, el hijo del Chapo, cuando lo apresaron los militares, de liberar al general Salvador Cienfuegos cuando la justicia de Estados Unidos lo consignó en Los Ángeles por acusaciones relativas al narcotráfico, y de haber prometido usar al Ejército mexicano para defender a los cárteles en contra de las acciones del gobierno estadounidense.
Joshua Treviño también apunta que hubo una investigación, del Departamento de Justicia estadounidense, sobre las conexiones monetarias entre AMLO y el Cártel de Sinaloa, pero que esta fue archivada. Además, expone a Adán Augusto por haber introducido a miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación en su equipo de gobierno cuando fue gobernador de Tabasco.
El imperio del crimen ha sentado sus reales en México y eso, en apariencia, ya les llenó el buche de piedritas a los estadounidenses. Trump comienza a cumplir su amenaza de invadirnos con fuerzas armadas mandándonos el portaaviones “Nimitz”, junto con un barco de guerra y el barco tanque “Henry J. Kaiser”. Además, un avión espía, un Boeing RC-135V, voló por aguas internacionales a lo largo del mar de Cortés frente a las costas de Sinaloa y Sonora.
EL GOBIERNO DE TRUMP ESTÁ TOMANDO CARTAS EN EL ASUNTO
El avión, si bien no tocó, en apariencia, territorio nacional, tiene una gran capacidad de espionaje y muy probablemente entró a recolectar datos en las costas de Sonora y Sinaloa. Es difícil saber desde aquí si violó el espacio aéreo mexicano. De cualquier modo, la presidenta Claudia Sheinbaum salió de inmediato a decir que el avión no tocó nuestro espacio aéreo.
Es posible suponer que la entrada de los buques de guerra a aguas internacionales próximas a nuestras costas se avisara de antemano al gobierno mexicano, pero todo lo anterior anuncia que el gobierno de Trump se ha cansado de tolerar el incremento del poder narco y está tomando cartas en el asunto.
Mientras esto sucede la lucha por el control de plazas entre el cártel de los Chapos y el del Mayo está a todo lo que da. La extorsión a la población es el nuevo modus operandi. Un amigo mío, que es médico especialista de alto nivel en Sinaloa, recibió un mensaje en el que le referían la dirección de su domicilio, los miembros de su familia, sus coches y un monto muy aproximado de sus ingresos, con lo que pusieron un precio, con insultos, a la protección del cártel. Mi amigo ya cambió su residencia y Culiacán se está quedando sin especialistas.
Esto apenas comienza y lo más probable es que las actividades militares y de inteligencia de Washington escalen su intervención. Las redes sociales reportan el cruce de drones provenientes de Estados Unidos que se internan en territorio nacional, pero esto no está confirmado, y el gobierno mexicano ni admite ni niega estos reportes.
¿REVIVIRÁN LAS INVESTIGACIONES SOBRE AMLO Y EL CÁRTEL DE SINALOA?
Una nueva era en las relaciones diplomáticas comienza y en ella estaremos supeditados a los designios de las fuerzas fácticas que mueven los hilos en Estados Unidos. Esto anuncia intervenciones fuera de lo acostumbrado de la milicia gringa en México y nuestro gobierno aceptará con sumisión o volteará los ojos para otro lado. Nuestra posición tanto económica como moral no le permite al gobierno el lujo de reclamar una soberanía que claudicó ante el narco.
El conflicto que tuvieron Marco Rubio, entonces senador de Estados Unidos, y Andrés Manuel López Obrador, otrora presidente de México, cuando el primero acusó al segundo de haber entregado a los cárteles del narcotráfico vastas zonas del territorio nacional renace con Rubio convertido en secretario de Estado y toma fuerza con la promesa del presidente Trump de eliminar de raíz a los cárteles.
Es claro que las declaraciones trumpianas habrá que matizarlas, pues un país con el número de narcodependientes que hay en Estados Unidos no puede estar sin el suministro controlado de narcóticos ilegales. Pero el problema es que en nuestro territorio dejamos que los proveedores se salieran de control y los estadounidenses tienen que dar un golpe de timón para poner orden.
Hay quien dice que las investigaciones sobre los tratos económicos entre AMLO y el Cártel de Sinaloa habrán de revivir. Por lo pronto, el expresidente mexicano no aparece por ningún lado y hay rumores de que ya se refugió en Cuba. ¿Será?
VAGÓN DE CABÚS
El margen de maniobra económico que tiene el gobierno mexicano es muy estrecho. Además, conforme los estadounidenses cierran la llave para el tráfico de fentanilo, las organizaciones criminales incrementan los robos a transportistas y las extorsiones a los ciudadanos.
Conforme escribo esto, los transportistas realizan bloqueos en la carretera de Querétaro, los comerciantes de mercados públicos hacen marcha desde Iztapalapa hasta la Secretaría de Desarrollo Económico, hay una marcha del Monumento de la Revolución a Palacio Nacional, los empleados de barberías del Estado de México bloquean la Vía Morelos y el caos vial es el común denominador en la ciudad capital.
Mal empieza la semana para el que ahorcan en lunes. N
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1. La frase en realidad proviene de un proverbio de África Occidental y originalmente reza: “Habla suavemente y lleva un gran garrote, así llegarás lejos”.
2. Arturo Sarukhan Casamitjana fue embajador de México en Estados Unidos, en los sexenios de Felipe Calderón Hinojosa y Enrique Peña Nieto.
3. The Spectator es una revista británica de gran prestigio en donde han escrito personajes como Nigel Lawson, exministro de Hacienda de la Gran Bretaña, y Boris Johnson, exprimer ministro del mismo país.
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Salvador Casanova es historiador y físico. Su vida profesional abarca la docencia, los medios de comunicación y la televisión cultural. Es autor del libro La maravillosa historia del tiempo y sus circunstancias. Los puntos de vista expresados en este artículo son responsabilidad del autor.