El sector inmobiliario enfrenta un panorama complicado en 2024, con un evidente descenso en las ventas de viviendas y un incremento en las rentas.
Al respecto, Ignacio Flores Lugo, presidente de la Asociación Mexicana de Profesionales Inmobiliarios (AMPI), destacó que, a pesar de las dificultades, el mercado de rentas ha logrado mantenerse estable y ha sido un “paliativo” para la falta de operaciones en la compraventa. Explicó que el crecimiento en el sector de arrendamientos ha ayudado a mitigar, en parte, los efectos negativos sobre la venta de propiedades, que enfrenta varios retos.
“Este año ha sido muy positivo en términos de rentas. No tenemos la cifra final, pero estimamos un incremento de al menos un 50% respecto al año pasado”, señaló Flores Lugo.
En cuanto a las razones detrás de la desaceleración en la compraventa inmobiliaria, Flores Lugo explicó que uno de los principales factores es el alto costo de las tasas de interés.
“Hoy, la tasa interbancaria prácticamente ofrece el doble de lo que rendiría una inversión inmobiliaria, lo que hace que muchos prefieran invertir su dinero en instrumentos financieros más rentables, en lugar de comprar propiedades”, indicó.
Otro de los problemas más destacados es la escasa construcción de viviendas accesibles. Flores Lugo señaló que, a lo largo del año, solo se construyeron 1,030 viviendas de menos de 660,000 pesos, cifra que resulta insuficiente para satisfacer la demanda del mercado.
“El número de operaciones en este sector ha sido muy bajo. Apenas registramos 20 operaciones de viviendas con ese precio”, agregó.
El presidente de AMPI también comentó que la economía informal ha tenido un impacto positivo en el mercado de arrendamientos. Señala que este sector, aunque no tiene acceso fácil a la compra de viviendas, representa una parte significativa de la demanda en el alquiler.
“La gente que está en la economía informal busca establecerse en nuevos puntos de venta, lo que genera una mayor demanda de propiedades en renta”, explicó.
A pesar de las dificultades, Flores Lugo destacó que en los últimos dos años ha aumentado el número de personas provenientes de estados vecinos como Zacatecas, León, y Ciudad de México, que están buscando rentar o comprar propiedades en la región. Este flujo migratorio ha sido positivo para el mercado, dado que muchos de estos nuevos residentes cuentan con la capacidad económica para adquirir o rentar propiedades.
Sin embargo, el sector de la vivienda sigue enfrentando desafíos. Según el presidente de AMPI, se estima que Aguascalientes debería contar con al menos 12,000 unidades para satisfacer la demanda, aunque las cifras preliminares indican que al final del año solo se alcanzarán unas 10,000 unidades.
En cuanto a las soluciones a largo plazo, Flores Lugo subrayó la importancia de fomentar la autoconstrucción como una alternativa más accesible para las familias.
“La autoconstrucción, aunque no es tan económica como una vivienda tradicional, permite a las personas edificar sus casas de manera paulatina, conforme a sus recursos”, explicó.
El presidente de AMPI también prevé que, con la disminución de las tasas de interés interbancarias en el próximo año, podría haber un alivio para quienes deseen adquirir una propiedad.
“Las tasas podrían llegar a niveles más favorables, lo que podría reactivar el mercado de compraventa”, añadió.
Finalmente, Flores Lugo reflexionó sobre el panorama de las casas abandonadas, particularmente aquellas del Infonavit. Aunque muchas de estas propiedades parecen desocupadas, explicó que muchas de ellas siguen siendo pagadas, ya que sus dueños se encuentran fuera de México.
“Parece que están abandonadas, pero siguen siendo financiadas, lo que mantiene su valor”, concluyó.