Los guerreros bárbaros de la antigua Roma podrían haber usado estimulantes, como drogas, para mejorar su rendimiento en la batalla, según un reciente estudio.
La práctica está sugerida por pequeños objetos con forma de cuchara colocados en los cinturones de los guerreros y que se han encontrado en varios sitios del norte de Europa, a tenor del artículo publicado en la revista Praehistorische Zeitschrift.
Los autores concluyen que los accesorios con forma de cuchara pueden haber servido como dispensadores de estimulantes para los guerreros germánicos que iban a la batalla. En la antigüedad, el término “bárbaro” se refería a pueblos no romanos, a menudo de tribus o culturas fuera del territorio controlado por Roma, como los grupos germánicos, celtas y hunos.
Los seres humanos han utilizado compuestos con efectos estimulantes durante milenios, a veces en la guerra, con el fin de aliviar el miedo o aumentar el estado de alerta. Si bien hay evidencia significativa del uso generalizado de narcóticos en la antigua Grecia y Roma, no se puede decir lo mismo de las personas que vivían en las tierras “bárbaras” de Europa, de quienes tradicionalmente se suponía que hacían poco uso de otras drogas aparte del alcohol.
“Nos preguntamos entonces si el consumo de estimulantes en el mundo bárbaro de la época romana era realmente inexistente. Si bien las fuentes antiguas nos informan sobre el consumo generalizado de diversas bebidas alcohólicas, lo que también confirman los hallazgos arqueológicos, no mencionan el consumo de otros estimulantes”, escribieron los autores en el estudio.
MEDIR LA DOSIS CORRECTA DE UN ESTIMULANTE
Dada la escasez de evidencia directa del uso de estimulantes entre los bárbaros de Europa, los investigadores decidieron buscar pistas indirectas. En el último estudio, el equipo de investigación identificó y clasificó numerosos objetos pequeños con forma de cuchara encontrados en docenas de yacimientos del norte de Europa que datan del periodo romano. Se trataba principalmente de yacimientos pantanosos y tumbas en Escandinavia, Alemania y Polonia.
Los objetos tienen asas unidas a un cuenco cóncavo o a un disco plano, de entre 10 y 20 milímetros de diámetro. Aunque estaban unidas a cinturones, no parecen haber desempeñado ningún papel en el funcionamiento de estas prendas.
El estudio también reveló que todos los objetos fueron encontrados junto con equipos utilizados en la guerra. Su forma y tamaño parecen descartar la posibilidad de que fueran utilizados como utensilios cosméticos e instrumentos médicos, según los investigadores. Los autores sugieren que los guerreros bárbaros podrían haber utilizado estos objetos para medir la dosis correcta de un estimulante determinado.
¿QUÉ ESTIMULANTES ESTUVIERON A DISPOSICIÓN DE LOS BÁRBAROS?
Los investigadores analizaron a continuación qué estimulantes podían haber estado a disposición de las comunidades germánicas de la época romana. Descubrieron que los pueblos germánicos de la época probablemente habrían tenido acceso a una amplia gama de sustancias capaces de proporcionar un efecto estimulante, como la amapola, el lúpulo, el cáñamo, el beleño, la belladona y diversos hongos.
Estos podrían haber sido consumidos en forma líquida (disueltos en alcohol, por ejemplo) o en forma de polvo. Los autores sugieren que el uso de estimulantes por parte de los pueblos germánicos puede haber sido extenso durante los conflictos del periodo romano. N
(Publicado en cooperación con Newsweek. Published in cooperation with Newsweek)