La Federación Internacional de la Cruz Roja cataloga como epidemia un incremento inesperado, a menudo repentino, de una enfermedad específica dentro de una comunidad o región. Entre las más conocidas está el dengue y ébola, causadas por virus, pero ¿se podrá registrar una epidemia por miopía? Según un nuevo artículo, sí.
La pandemia de covid-19 no solo cambió la forma en que los infantes aprenden, también transformó la forma de sus globos oculares. A medida que las clases presenciales fueron reemplazadas por reuniones virtuales, los menores pasaban más tiempo enfocados en pantallas (celulares, computadoras y tabletas) y menos en actividades al aire libre, ¿cuál fue la consecuencia?
“Este cambio provocó un cambio notable en la anatomía de los niños: sus globos oculares se alargaron para adaptarse mejor a las tareas de visión corta”, refiere un nuevo artículo de la revista académica Nature. Un análisis realizado en Hong Kong incluso informó que la incidencia de globos oculares estirados patológicamente entre niños de seis años casi se duplicó en comparación con los niveles prepandémicos.
“Este alargamiento mejora la claridad de las imágenes de primeros planos en la retina, la capa sensible a la luz en la parte posterior del ojo. Pero también hace que los objetos lejanos parezcan borrosos, lo que lleva a una condición conocida como miopía”, dice el informe.
Si bien usar lentes puede solucionar el problema, la miopía severa puede provocar complicaciones más graves como desprendimiento de retina, degeneración macular, glaucoma e incluso ceguera permanente. De acuerdo con estimaciones oficiales, se calcula que más del 50 por ciento de la población mundial será miope en 2050.
PATRONES DE DESENFOQUE Y LA LUZ, ELEMENTOS A CONSIDERAR EN EL TEMA DE MIOPÍA
Mayo Clinic define a la miopía como una afección frecuente de la visión en donde los objetos cercanos se ven claros y los objetos lejanos lucen borrosos.
“A medida que el ojo se desarrolla, constantemente afina su forma en respuesta a ciertas señales visuales. Si esas señales indican que el ojo es demasiado corto, se estira para enfocar los objetos. Por el contrario, si el ojo se alarga demasiado, recibirá señales de ‘alto’, que son cruciales para prevenir la miopía”, explican expertos a Nature.
El origen de estas señales de parada ha sido objeto de mucho debate en la comunidad de investigación. Estudios en monos, musarañas y pollos (todos modelos animales comunes para la investigación de la miopía) han señalado que la liberación del neurotransmisor dopamina en la parte posterior del ojo es un probable desencadenante. Se cree que el neurotransmisor aumenta en respuesta a los altos niveles de luz ambiental que se encuentran en entornos iluminados por el sol.
Sin embargo, una teoría alternativa sostiene que los beneficios protectores de la exposición al aire libre podrían estar menos relacionados con la luz y más asociados con los patrones de desenfoque experimentados en la retina en diferentes entornos visuales.
En palabras de Ian Flitcroft, oftalmólogo pediátrico del Centro de Investigación Ocular de Irlanda en Dublín, el paisaje visual al aire libre es rico y texturizado, y sus elementos generalmente se ven a distancias tan grandes que la amplia gama de detalles se fusiona en una imagen más uniforme.
ACTIVIDADES AL AIRE LIBRE
En ese sentido, funcionarios de salud pública de Taiwán introdujeron un programa llamado Tian-Tian 120, que significa 120 diarios, que fomenta un mínimo de dos horas de actividad al aire libre al día.
“Se le atribuye ampliamente haber frenado las tasas de miopía en rápido aumento en la región”, comenta Ian Flitcroft.
Por lo anterior y para contrarrestar estos efectos, se recomiendan varias medidas:
- Limitar el tiempo frente a pantallas y tomar descansos frecuentes (la regla 20-20-20: cada 20 minutos, mirar algo a 20 metros de distancia durante 20 segundos).
- Aumentar el tiempo al aire libre siempre que sea posible.
- Mantener una postura adecuada y una buena iluminación mientras se utilizan dispositivos electrónicos.
- Realizar revisiones oftalmológicas periódicas para detectar y tratar la miopía tempranamente. N