Avizorando un 2024 complicado para Aguascalientes en materia de sequía, la gobernadora Tere Jiménez no descarta la posibilidad de que se vuelvan a bombardear las nubes para estimular las lluvias en el campo, estrategia ya utilizada en el verano de 2023 de la mano de la Secretaría de Agricultura federal.
Adicional a acciones como los programas de apoyo y financiamiento a productores, el avance en la tecnificación del Distrito de Riego 001, o la solicitud a la federación para que emita una declaratoria de emergencia por sequía, la mandataria estatal ya se anticipa a otro escenario adverso para los más de 1,200 trabajadores del campo de la entidad.
“Si vemos un caso extremo, por supuesto que tendremos que hacerlo; si hay necesidad lo trabajamos entre los 3 niveles de gobierno. Son presupuestos importantes que se tienen que destinar de acuerdo a las mesas de trabajo que llevamos con los sectores involucrados” comentó.
Aunado a este plan, Jiménez Esquivel comenta que continuamente se sostienen reuniones entre agricultores, ganaderos y todos los sectores involucrados con la Secretaría de Desarrollo Rural y Agroempresarial (SEDRAE), buscando tener conocimiento de las problemáticas del campo.
Finalmente, la gobernadora subraya que su administración siempre apoyará con los recursos que sean necesarios, buscando que la agroindustria local siga teniendo calidad y alcance de exportación internacional.
De acuerdo con la publicación más reciente del Monitor de Sequía de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA), en el estado se viven 4 niveles de sequía diferentes. Al poniente, principalmente en Calvillo y San José de Gracia, se atraviesa sequía extrema y severa, mientras que el Valle de Aguascalientes se maneja como anormalmente seco y con sequía moderada.