Como tijuanenses sabemos los riesgos que implica vivir en esta ciudad fronteriza, donde cada día vivimos situaciones que afectan a la población en general, ya sean problemas relacionados con la falta de agua, luz y que decir de la seguridad, siendo este último un problema que ha afectado desde hace muchos años la calidad de vida de los ciudadanos en esta región.
En ese sentido, existe un problema que a medida que pasa el tiempo se hace más presente en esta ciudad, el cual está poniendo en riesgo la salud y el bienestar de todos los ciudadanos, quienes incluso se ven expuestos a esta situación con solo salir de sus casas, y en algunos casos, ni saliendo de ellas.
Del mismo modo, esta situación en los hogares, puede percibirse a través de un olor que llega de manera intensa y repugnante, provocando a su vez enfermedades y problemas de salud que pueden afectar nuestro rendimiento a largo plazo durante las actividades que realizamos a diario, ya sea en nuestra vida personal o profesional. Es por ello que nos referimos a las aguas residuales en la ciudad de Tijuana.
El residente del área de Santa Fe 1ra sección, Ricardo Perales, explicó que, la planta de tratamientos de aguas residuales de la zona donde vive no ha recibido el mantenimiento adecuado, lo cual está provocando un olor fétido que actualmente está poniendo riesgo de enfermedades entre los habitantes en ese sector de la ciudad.
“Para mí, son náuseas, dolor de cabeza, malestares físicos, afectando incluso el sueño, porque en la madrugada se suelta el olor de repente y aun teniendo las ventanas y todo sellado se mete el olor de tan fuerte que es”, aseveró Ricardo Perales.
Explicó que, la situación se generó debido a la falta de tanques de aireación para el tratamiento de las aguas residuales, donde las autoridades correspondientes acordaron que para el primero de diciembre de este año se iban a instalar. Sin embargo, cuando Ricardo llamó a la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Tijuana (CESPT), para saber el estatus de los tanques, le comentaron que, aún no tienen información al respecto.
Dicho eso, el olor fétido en esa zona de la ciudad, es por la obstrucción en los tubos de desagüe que se generó debido a la construcción del nuevo fraccionamiento localizado enfrente de la 1ra sección de Santa Fe, lo cual provoca que se estanque el agua de la planta de tratamientos de aguas residuales.
Además, la planta ya rebasó el límite de su capacidad, a causa del incremento de fraccionamientos que ha tenido el área de Santa Fe. Haciendo énfasis que, esa planta se construyó hace 10 años, y durante esa época aún no había la cantidad de residentes en comparación de la cifra actual.
Ricardo mencionó que, a la fecha solo se ha destapado el tubo del drenaje en la zona para evitar que las aguas residuales regresen a las residencias, lo cual no resuelve el problema a raíz.
“Varios vecinos han comentado que es insoportable el olor, han tratado de expresar su incomodidad esperando respuesta por parte de las autoridades”
La presidenta de la 1ra sección de Santa Fe expresó que, es un tema complejo, el cual se resolverá si se construye una nueva planta de tratamientos para que se puedan conectar con la tubería de los fraccionamientos que se han estado construyendo. Haciendo énfasis que, faltan años para que se logre realizar la obra.
Manifestó Ricardo que, entre 200 a 300 personas se han visto afectadas por el problema de las aguas residuales en la privada donde reside, sin mencionar que, esta situación involucra también a otras áreas como el fraccionamiento de praderas de la gloria.
“Despierto a las 6 de la mañana, ya está oliendo, supongo porque todas las personas estamos usando los baños. Es un olor muy desagradable, tengo que prender los abanicos para que circule el aire y aun así se queda penetrado el olor y no es en mi casa únicamente sino en las casas allí de la privada donde vivo”, expresó Ricardo.
Ricardo consideró que, la solución del problema sería eliminar la planta de tratamiento de aguas residuales en la 1ra sección de Santa Fe y construir una nueva donde afecta los fraccionamientos de los alrededores. Además, para evitar que esta situación afecte a otras zonas de la ciudad, se necesita una planeación más estratégica, así como mayor mantenimiento a las plantas residuales.
No cabe duda, que la ciudad de Tijuana está atravesando por una etapa complicada, donde los ciudadanos son los que salen más afectados ante este tipo de circunstancias, siendo esta situación, un problema más que se ha venido arrastrando desde años atrás, poniendo en riesgo la salud no solo de la población aquí en la región, sino también de las futuras generaciones que podrían sufrir las consecuencias si no existe un seguimiento a los temas actuales. N