En días próximos Carlos González Gutiérrez cónsul general en San Diego realiza una transición con ese mismo cargo, pero ahora en Los Ángeles. González Gutiérrez, quien expresó que “la verdad que es un honor ser cónsul general en San Diego. Es una ciudad donde se puede palpar de manera táctica. Es decir, tocar la relación bilateral México- Estados Unidos, creo yo que hacia San Diego se movió el centro de esta relación durante los últimos años.”

Además, señaló la importancia de “darle seguimiento a una agenda de infraestructura fronteriza para todo el país, así como atender una comunidad binacional, que duerme en Tijuana y trabaja en San Diego.”

El cónsul ha destacado la importancia de San Diego en la relación bilateral entre México y Estados Unidos, describiéndola como el epicentro de esta conexión. Su énfasis en la infraestructura fronteriza y en atender a una comunidad binacional resalta la complejidad y la interdependencia de estas dos regiones.

González subrayó que “los habitantes de la región están plenamente conscientes que la prosperidad depende del otro lado. En ambos lados de la frontera yo encontré líderes comunitarios, de opinión, electos y empresariales que estaban plenamente conscientes que lo más importante para la prosperidad de la región era el procurar mayor integración económica y social. En otras palabras, como hacer menos la frontera, mitigar su presencia y facilitar los cruces.”

Al referirse al nuevo desafío en Los Ángeles, explicó que “el condado de los Ángeles es el más poblado en todos los Estados Unidos, existe una población de origen mexicano de 3.9 millones de personas, de las cuales 1.6 millones nacieron en nuestro país, por eso es que el consulado de Los Ángeles es la oficina consular que tiene nuestro país en los Estados Unidos, son cerca de 140 personas laborando ahí cotidianamente.”

Entre los retos actuales, González destacó la necesidad de asegurarse de que “nuestros proyectos sean sistémicos, que tengan un impacto en toda la comunidad, o en una buena parte de la comunidad, que no se pierdan en ese océano enorme que es una comunidad de 3.9 millones de personas, es decir cómo pueden tener un impacto sistémico de largo plazo, que se sienta, que se vea, que se escuche, que sea mediático.”

Añadió que “otro reto es que el consulado pueda transmitir que a final de cuentas es una casa de servicio, que está para atender la necesidad de documentos de identidad, de viaje, de protección y asesoría legal del mexicano residente en Los Ángeles.”

En este sentido es importante hacer énfasis en la importancia de los tópicos binacionales, ya que delinean el panorama dinámico y multifacético de las responsabilidades consulares en una región clave para las relaciones bilaterales y para la comunidad mexicana en Estados Unidos. Estos aspectos no solo resaltan desafíos y logros específicos, sino que también ofrecen una perspectiva sobre la evolución y la adaptación necesaria en el servicio consular. N