Rusia lanzó este viernes 11 de agosto su primera misión robótica a la Luna en casi 50 años con el objetivo de dar un nuevo impulso a su programa espacial, el cual acumuló dificultades en los últimos años y que ahora está aislado por el conflicto en Ucrania.
El lanzamiento del módulo Luna-25 es la primera misión rusa a la Luna desde 1976, una era en la que la extinta Unión Soviética estaba a la vanguardia de la conquista del espacio. Pero desde la caída de la URSS, Moscú se enfrenta a una serie de dificultades como la falta de financiamiento y los escándalos de corrupción.
EN CINCO DÍAS LLEGARÁ LA SONDA A LA LUNA
El cohete Soyuz que transporta esta sonda de casi 800 kilos despegó desde la base espacial de Vostochni, en el extremo oriente, a las 02:10 de Moscú (23:10 del jueves), según imágenes difundidas en directo por la agencia espacial Roscosmos. La aeronave se elevó dejando atrás una espesa nube de humo y llamas que destacaba en el cielo grisáceo.
Está previsto que el aparato llegue en cinco días a la órbita lunar, donde estará entre tres y siete días para escoger un buen lugar para el alunizaje en la zona del polo sur del satélite. Una fuente de Roscosmos contactada por AFP indicó que se proyecta que el alunizaje tenga lugar el 21 de agosto.
“Por primera vez en la historia va a haber un alunizaje en el polo sur lunar. Hasta ahora, todo el mundo alunizaba en la zona ecuatorial”, afirmó Alexander Blojin en una entrevista reciente al diario oficial Rossíiskaya Gazeta.
RUSIA PREVÉ UNA MISIÓN DE UN AÑO EN LA LUNA
La agencia espacial rusa prevé una misión de un año con el objetivo de recoger muestras y analizar el suelo y de llevar a cabo “investigaciones científicas a largo plazo”. Este lanzamiento se produce en un contexto de aislamiento del programa ruso, ya que Roscosmos está vetado por las potencias occidentales.
En sintonía con su estrategia diplomática, Rusia busca desarrollar la cooperación espacial con China.
El presidente de Rusia, Vladimir Putin, prometió continuar con el programa espacial, pese a las sanciones, citando como ejemplo el momento en el que la URSS envió el primer hombre al espacio en 1961, en medio de las tensiones con Occidente.
“Estamos guiados por la ambición de nuestros ancestros para seguir adelante, pese a las dificultades y los intentos para obstaculizarnos”, dijo el año pasado Putin en una vista a Vostochni. El director de Roscosmos, Yuri Borisov, reconoció en junio que la misión es “arriesgada”. “En el mundo, la posibilidad de éxito de ese tipo de misiones se calcula en un 70 por ciento”, dijo en una reunión con Putin. N
(Con información de AFP)