El perro más longevo del mundo se llama Bobi y tiene 30 años. El sabueso vive en un pequeño pueblo del centro de Portugal. Guinness World Records fue encargado de darle esta asignación.
“¡No esperábamos tal acogida!”, dijo sorprendido Leonel Costa, su propietario de 38 años. Desde hace varios días, curiosos y periodistas del mundo entero llegan para conocer a su mascota.
El perro, de pelo castaño y muy sociable, pesa 29 kilos. Vive rodeado de gatos en una casa de Conqueiros, un pequeño pueblo cerca de Leiria, en el centro del país. La organización del Guinness, que recoge récords a nivel mundial, hizo el anuncio el 1 de febrero.
EL PERRO TIENE 30 AÑOS Y MÁS DE 266 DÍAS
Ese día, el perro tenía 30 años y 266 días, lo que lo convirtió en el perro más longevo de todos los tiempos. Bobi es un Rafeiro de pura raza, con una esperanza de vida media de entre 12 y 14 años, recuerda el Guinness. “Quería que se reconociera su edad”, dijo Leonel Costa a la AFP. El perro fue el único de cuatro cachorros en sobrevivir.
Costa explica la longevidad de su perro por el ambiente tranquilo en el que vive y la “alimentación variada” que recibe en casa, basada en “carne y pescado”. “Siempre comió lo que comemos”, subrayó. El récord de Bobi plantea sin embargo muchos interrogantes.
EL CASO DE BOBI ES “CURIOSO”
“No puedo decir que es imposible, pero es curioso”, porque por las imágenes difundidas no parecen mostrar los signos de un perro muy viejo, como ‘problemas de movilidad’ o ‘masa muscular’, explicó a la AFP Miguel Figueiredo, veterinario de la clínica Joao XXI de Lisboa.
Dos semanas después de anunciar a Spike como el perro vivo más antiguo del mundo, Guinness World Records recibió pruebas de un perro mayor. Bobi nació el 11 de mayo de 1992. Bobi es un rafeiro do Alentejo de raza pura, que es una raza de perro guardián de ganado con una esperanza de vida promedio de 12 a 14 años.
Antes de Bobi, Bluey fue el perro más viejo de la historia. Vivió de 1910 a 1939, era un perro ganadero australiano que vivió hasta los 29 años y 5 meses. Costa recordó que el tenía ocho años cuando Bobi nació. “Mi padre era un cazador, y siempre tuvimos muchos perros”. N
(Con información de AFP)