Estados Unidos y Cuba se reunieron este 18 y 19 de enero en La Habana para dialogar y “coordinarse” frente a problemas como la delincuencia organizada que incluye tráfico de personas y de drogas. Esta es la primera reunión de este tipo desde 2018.
Este tipo de diálogo “mejora la seguridad nacional de Estados Unidos a través de una mejor coordinación internacional del cumplimiento de la ley” y permite llevar ante la justicia a los delincuentes transnacionales, informó el Departamento de Estado estadounidense en un comunicado.
EUA Y CUBA CONTRA LOS CRIMINALES
Estos diálogos fortalecen la capacidad de Estados Unidos para combatir a los actores criminales aumentando la cooperación en una serie de asuntos de aplicación de la ley, indica el documento.
“Una mayor coordinación de la aplicación de la ley es en el mejor interés de Estados Unidos y el pueblo cubano. Este diálogo no afecta al enfoque continuo de la administración en cuestiones críticas de derechos humanos en Cuba”.
Estas discusiones marcaron el primer diálogo de aplicación de la ley entre Estados Unidos y Cuba desde 2018. Estados Unidos y Cuba celebraron cuatro diálogos de aplicación de la ley de 2015 a 2018.
“Participar en estas conversaciones subraya nuestro compromiso de llevar a cabo conversaciones constructivas con el gobierno de Cuba. Esto siempre que sea apropiado para promover los intereses de los Estados Unidos”.
BIDEN ENDURECIÓ SU POSICIÓN CONTRA CUBA
A su llegada a la Casa Blanca en enero de 2021, Biden prometió revisar la política estadounidense hacia Cuba. Sin embargo, endureció su posición tras las manifestaciones antigubernamentales de julio de ese mismo año.
Las históricas protestas se saldaron con un muerto y decenas de heridos. De acuerdo con cifras oficiales, más de 500 manifestantes purgan sentencias de hasta 25 años de prisión.
El canciller cubano Bruno Rodríguez afirmó por su parte que “la cooperación bilateral para enfrentar flagelos como el terrorismo, el tráfico ilícito de migrantes y el fraude migratorio beneficia a ambos países”.
Añadió: “estamos comprometidos con ella a pesar del bloqueo económico y de incesante hostilidad de Estados Unidos” hacia Cuba. Washington también tiene la intención de “continuar conversaciones constructivas con el gobierno de Cuba. Siempre y cuando corresponda para promover los intereses de Estados Unidos”, especifica el Departamento de Estado. N