Los jefes de Estado y de gobierno de la OTAN lanzaron formalmente este miércoles el proceso de adhesión de Finlandia y Suecia. Dos países que decidieron abandonar su tradicional neutralidad militar después de que Rusia invadiera Ucrania a fines de febrero.
“Hoy, hemos decidido invitar a Finlandia y Suecia a convertirse en miembros”. “Acordamos firmar los Protocolos de Acceso”, afirma la declaración final, sobre un proceso que podría aún alargarse unos meses.
El Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que el acuerdo celebrado anoche por Turquía, Finlandia y Suecia allanó el camino para esa decisión.
“Me gustaría dar las gracias a Turquía, Finlandia y Suecia por aceptar mi invitación a entablar negociaciones para encontrar un camino unido a seguir. Este ha sido un trabajo duro durante muchas semanas, con múltiples contactos a muchos niveles diferentes.
“Altos funcionarios han mantenido dos rondas de conversaciones en Bruselas bajo mis auspicios. Y anoche nos reunimos con el presidente Erdoğan, el presidente Niinistö y el primer ministro Andersson, y pudimos llegar al acuerdo final”, añadió.
En tanto, el residente estadounidense, Joe Biden dijo: “En el momento en que Putin ha hecho saltar en pedazos la paz en Europa y atacado los más esenciales principios del orden internacional basado en reglas, Estados Unidos y nuestros aliados vamos a fortalecernos”. Ello al anunciar el refuerzo de la presencia militar estadounidense en Europa.
CAMBIO FUNDAMENTAL EN LA DEFENSA DE LA OTAN
Ello supondrá un aumento del despliegue en España (con dos nuevos destructores de la US Navy en la base de Rota, que pasará de 4 a 6), Polonia, Rumanía, los estados bálticos, el Reino Unido, Alemania e Italia.
Los líderes de la OTAN decidieron un cambio fundamental en su defensa y disuasión para responder a una nueva realidad de seguridad.
“Reforzaremos nuestras defensas delanteras. Mejoraremos nuestros grupos de batalla en la parte oriental de la Alianza, hasta el nivel de brigada. Transformaremos la Fuerza de Respuesta de la OTAN.
“Y aumentar el número de fuerzas de alta preparación a más de 300.000. También aumentaremos nuestra capacidad de refuerzo, incluso con más equipo preposicionado y reservas de suministros militares. Más capacidades de despliegue delantero, como la defensa aérea. Mando y control reforzados. Y planes de defensa mejorados, con fuerzas preasignadas para defender aliados específicos”.
La OTAN dijo que “esta es la primera vez desde la Guerra Fría que tenemos este tipo de planes con fuerzas preasignadas”.
Hoy, los aliados se han vuelto a comprometer con la promesa que hicimos en 2014 de gastar al menos el 2 por ciento del PIB en defensa. N