Para restituir el derecho de vivir en familia de niñas, niños y adolescentes que están bajo la tutela del DIF Estatal y que por cuestiones de edad, salud o discapacidad no han podido ser asignados en adopción o acogimiento familiar, se pondrá en marcha el programa “Familia Contigo”, mediante el cual se flexibiliza el proceso de convivencias supervisadas para generar vínculos afectivos en las personas que desean adoptar o cuidar temporalmente.
Durante la presentación del programa, la presidenta del DIF Estatal, Yolanda Ramírez de Orozco, comentó que para el organismo es importante que se busquen estrategias de sensibilización para que los infantes y adolescentes con situación jurídica resuelta, no sigan viviendo en un centro de asistencia social, sino que puedan crecer en una familia, ya sea en adopción o en el modelo transitorio de acogimiento.
Resaltó que existen muchos mitos con relación a la adopción de niñas y niños mayores de seis años, es por ello que con este programa se trabajará con las personas interesadas en adoptar o en acogimiento familiar, para que se abran a la oportunidad de convivir y crear un vínculo afectivo con infantes que superen la edad referida.
Indicó que el organismo debe facilitar el vínculo y convivencia entre los menores de edad y las familias interesadas en adoptarlos o cuidarlos de manera temporal, pues siempre será mejor que vivan en un hogar.
Por su parte, la Procuradora de Protección de Derechos de Niñas, Niños y Adolescentes, Zulema González Reyna, reveló que actualmente son 34 menores de edad que tienen su situación jurídica resuelta pero que siguen viviendo en centros de asistencia social debido a su edad o porque presentan alguna discapacidad y es complicado que sean adoptados.
Destacó que este es un proyecto flexible en los trámites, pero lo suficientemente cuidado en su aspecto legal, salvaguardando en todo momento el interés del infante.
Mencionó que con este programa se contempla un contacto gradual, supervisado, cuidado y que no sea invasivo para la niña, niño o adolescente con la familia candidata, pues el interés es crear ese lazo emocional hasta poder promover en su momento el trámite de adopción o acogimiento familiar.