UN NÚMERO “sin precedentes” de migrantes fueron interceptados al cruzar ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México en julio, informó el Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
En total, hubo 212,672 personas que intentaron cruzar la frontera, el 27 por ciento de ellas tuvieron al menos una detención previa en los 12 meses anteriores.
“El gran número de expulsiones durante la pandemia ha contribuido a que un número de migrantes sea mayor de lo habitual que realicen múltiples intentos de cruce fronterizo, lo que significa que el total de encuentros exagera un poco el número de personas únicas que llegan a la frontera”, informa un comunicado del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos.
“Estamos encontrando un número sin precedentes de migrantes entre los puertos de entrada de nuestra frontera sur. La situación en la frontera es uno de los retos más difíciles a los que nos enfrentamos. Es complicada, cambiante y afecta a personas vulnerables en un momento de pandemia mundial”, dijo este jueves el secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, en una conferencia de prensa en Texas.
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Las autoridades fronterizas también informaron que la cifra de niños no acompañados aumentaron un 24 por ciento, con 18.962 encuentros en julio en comparación con 15.234 en junio.
“En julio, el número promedio de niños no acompañados bajo custodia era de 1.363 por día, en comparación con un promedio de 794 por día en junio”.
La mayoría (52 por ciento) de los migrantes interceptados siguen siendo adultos solteros, con 110.443 detenciones en julio, una disminución del 6 por ciento con respecto a junio.
Mayorkas agregó que hay varias razones para el aumento de la llegada de migrantes a la frontera sur, como el empeoramiento de las condiciones, por supuesto, en los países de origen, incluyendo la pobreza, un aumento de la violencia y la corrupción.
“Chicos jóvenes cuyas vidas están amenazadas, si se negaron a unirse a pandillas, mujeres jóvenes que son vulnerables a la violación mientras caminan a la escuela. Trágicamente, el expresidente Trump redujo drásticamente nuestra asistencia internacional a Guatemala, El Salvador y Honduras.
“Se recortaron los recursos que estábamos contribuyendo para abordar las causas profundas de la migración irregular. Otra razón es el fin de las crueles políticas de la pasada administración y el restablecimiento del estado de derecho de este país que el Congreso ha aprobado, incluidas nuestras leyes de asilo que proporcionan ayuda humanitaria. Y en tercer lugar, e importante, está el resurgimiento de la economía en los Estados Unidos, y el brillo de la promesa estadounidense, una vez más”. N