Luego de que este miércoles la Fiscalía General de la República giró la orden de aprehensión contra el gobernador de Tamaulipas, Francisco Javier Cabeza de Vaca, el Presidente Andrés Manuel López Obrador dijo que él no está dando instrucciones de qué hacer.
El gobernador tamaulipeco acusó una persecución de estado, a través de un documento que hizo público en redes sociales detalló que la orden de su captura salió de Palacio Nacional y se debe a que Morena está bajando en la preferencia electoral.
“Es una cuestión que está tratando la Fiscalía General de la República que es independientes, autónoma. Yo no estoy dando instrucciones, no es mi fuerte la venganza, no soy hipócrita, no soy de dos caras como lo son los conservadores, que esa es su doctrina, la hipocresía”, destacó.
Al gobernador de Tamaulipas lo buscan por lavado de dinero y delincuencia organizada, aunque durante el juicio de desafuero se dijo que era una situación fiscal.
López Obrador insistió en lo que ha repetido reiteradamente en muchas ocasiones, que él no es tapadera de nadie y que la justicia está encima de todo.
La Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) ordenó congelar las cuentas bancarias del gobernador, y exhibió esta mañana un documento donde autoridades de Estados Unidos informan que lo investigan por lavado de dinero.
AMLO dijo que el Senado de la República debe nombrar un gobernador interino, porque según él no hay autoridad estatal en Tamaulipas en este momento. Para nombrar interino, el Presidente, dice la ley, es el que propondrá una terna que los senadores votarán.
Los especialistas en derecho no se ponen de acuerdo, porque públicamente la Corte dijo que Cabeza de Vaca mantiene el fuero, pero la FGR aún así gira orden de aprehensión. Algunas versiones establecen que no puede ser detenido en Tamaulipas, pero si en otra parte de la República.
Ya se vigilan aeropuertos y adunas para notificar si tiene intenciones de salir del país.